Domingo A. Rangel
Si alguién piensa que al Coqui lo crearon entre la CIA y el Mossad… esa persona es parte del problema. Pero igual no ayuda quien crea que al joven y famoso delincuente lo armaron y dejaron hacer… como parte de una conjura desde el gobierno bolivariano.
Tampoco servirá de mucho quien piense que la responsabilidad sobre este tipo de bandas… es una exclusiva de los gobiernos del siglo XXI. Así cómo no puede haber agua sin la presencia de sus dos moléculas fundamentales… bandas como la del Coqui y otros delincuentes… nunca habrían existido sin la irresponsabilidad urbana del Puntofijismo.
A la huida del dictador Pérez Jiménez… doy fe que no habían en Caracas viviendas precarias y pobres … como lo que después proliferó… y llamaron “ranchos”.
De niño fui con el colegió Neverí… a pasar un día caminando en ese cerrito donde campea El Coqui… recuerdo venaditos, riachuelo y un cunaguaro porque esa zona verde era reserva y no se tocaba.
Fue el despelote puntofijista que algunos sueñan puede volver… el que irresponsablemente permitió el crecimiento anárquico de esos barrios y su conurbación. Hasta se jactaban de que ese horror que es Petare era el barrio más grande de Latinoamérica. En sitios así… donde a diario salen vecinos decentes que son la mayoría… a trabajar o estudiar… también proliferan todos los males… y las bandas son uno.
Ese es un gran tema para que políticos de todas las tendencias… gobierno… oposiciones… o liberales… pudiéramos coincidir decidiendo sacar del debate determinados puntos que entre todos se pueden resolver.
Pero no… eso es mucho pedir.
Los diálogos son sabrosos para viajar como sauditas… a sitios donde verán estos dialogantes… como si fuesen locos escapados.
Locos porque ayer eran abstencionistas… y hoy furiosos hinchas del voto… orates porque ayer pedían sanciones… y hoy piden que las retiren… como si las potencias fuesen adolescentes malcriados.
Resolver el problema de estas bandas es difícil por falta de apoyo político… y de credibilidad.
No se pueden acabar con las bandas… lo cual es fácil… sin unidad alrededor del tema.
Y no la hay: unos piden en la negociación más cargos de los que el gobierno les acaba de dar… otros monopolios económicos… ninguno ofrece apoyo a quien se atreva a enfrentar al Coqui y su banda. Y la almiranta que dirige el ataque a la Cota 905… va de candidata… y así caen nuevas dudas.
