El presidente de China, Xi Jinping, instó a realizar esfuerzos para minimizar el número de víctimas tras el paso del tifón Doksuri y que no se escatimen esfuerzos para buscar y rescatar a las personas desaparecidas o atrapadas en inundaciones y desastres geológicos, en una instrucción sobre los trabajos relativos a la prevención de inundaciones y el alivio de desastres.
Tras el tifón “Doksuri”, se registraron las lluvias extremas en el norte de China y las regiones a lo largo de los ríos Amarillo y Huaihe, lo que generó inundaciones y desastres geológicos, que a su vez dejaron grandes bajas en Beijing y Hebei.
El mandatario chino dijo que es crucial garantizar el tratamiento médico de los heridos y ofrecer consuelo a las familias de los fallecidos. Xi exigió hacer los arreglos necesarios para las personas afectadas por las inundaciones y desastres geológicos, reparar oportunamente la infraestructura dañada como el transporte, las telecomunicaciones y las instalaciones eléctricas, y reanudar el orden normal de trabajo y la vida lo antes posible.
En la ciudad de Beijing, las lluvias dejaron 11 fallecidos y 27 desaparecidos, indicaron las autoridades. Entre las personas que perdieron la vida, se encuentran dos trabajadores de los servicios de emergencia.
Según el balance de las autoridades chinas, entre los desaparecidos hay cuatro miembros de un equipo de salvamento que cayeron al agua en una zona rural.
Las precipitaciones, las más intensas registradas en Beijing en los últimos años, han afectado a más de 44.000 personas y han obligado a evacuar a unas 127.000 personas en el país asiático.
Los habitantes de las ciudades de Zhangjiakou, Chengde, Tangshan, Baoding y Xiong’an, cercanas a Beijing, también se han visto afectados por las intensas precipitaciones y por lo que se activó la evacuación de residentes.
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