Los derechos humanos de las mujeres y niñas son violados gracias a las medidas coercitivas unilaterales impuestas por los Estados Unidos y la Unión Europea, denunció ante el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer de la Organización de Naciones Unidas la Organización pro Derechos Humanos Sures.

Ana Salazar, vocera de Sures, explicó que Venezuela ha sufrido durante los últimos años dos situaciones que han causado graves consecuencias que atentan contra los derechos humanos del pueblo, y de manera particular, de las mujeres y niñas.

“La primera se liga con la aplicación de medidas coercitivas unilaterales, criminales e ilegales, destinadas a destruir la economía, desestabilizar la democracia y a acabar con el modelo social inclusivo reconocido por las Naciones Unidas, y constatado en su reciente visita a Venezuela por la relatora especial sobre el impacto de las medidas coercitivas unilaterales en los derechos humanos”, explanó Salazar.

Como segundo evento están, según la vocera de Sures, las graves consecuencias generadas por la pandemia de la covid-19 que exacerbó las injusticias y profundizó las desigualdades ya existentes, “con consecuencias negativas en los derechos humanos, acentuadas en nuestro país por el bloqueo económico que ya vivimos, que no ha cesado en tiempo de pandemia sino que por el contrario se tradujo en un desigual acceso a las vacunas y tratamientos”.

“Estas situaciones han generado una migración económica atípica de las venezolanas en los últimos años. Nuestras investigaciones muestran que mujeres y niñas han sido objeto de trata de personas por parte de organizaciones delictivas. Aquellas en edad reproductiva han sufrido violaciones a sus derechos en los países de destino.  Discriminación y tratos diferenciados, particularmente en el acceso a la atención médica y en el mercado de trabajo”, denunció Ana Salazar. 

Con información de ÚN

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