El canciller de la República Bolivariana de Venezuela, Félix Plasencia reiteró la posición histórica de Venezuela, en torno a la necesidad de eliminar completamente las armas nucleares y se adhiere a la declaración del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL), para manifestar su firme compromiso en la promoción y consolidación de un mundo más seguro y pacífico.
Por: Espectador de Caracas con información de Últimas Noticias
Al participar en la Reunión Plenaria de Alto Nivel de la Asamblea General para celebrar y promover el “Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares”, el Jefe de la diplomacia venezolana aseveró que “las armas nucleares y de destrucción masiva constituyen un riesgo latente (…) Su inclusión en las doctrinas de seguridad y defensa de algunos países, son una amenaza común para la humanidad”.
Asimismo, Plasencia destacó que “los Estados poseedores de armas nucleares, deben adoptar sin más demoras medidas orientadas al desarme general, completo, no discriminatorio y sin dobles raseros, con estricto apego a los principios de transparencia, irreversibilidad y verificabilidad”.
Recordó que nuestro país manifestado su irrestricta condena a la producción, almacenamiento, uso y amenaza de las armas de destrucción masiva, incluyendo, las armas nucleares, enfatizando que esta contundente posición mantenida en décadas, “… se ha visto favorecida y robustecida por el consenso regional existente desde que la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (CELAC) fuese declarada en el año 2014 como una Zona de Paz”.
A continuación el texto íntegro de la alocución del canciller de la República:
Discurso del Canciller Plasencia en Reunión Plenaria de la ONU para celebrar el “Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares”
La República Bolivariana de Venezuela se adhiere a la declaración del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) y reitera su histórica posición de principios respecto de la necesidad de eliminar completamente las armas nucleares, así como su firme compromiso en la promoción y consolidación de un mundo más seguro y pacífico.
Las armas nucleares y de destrucción masiva constituyen un riesgo latente que amenaza todas las formas de vida existentes en el planeta y, en una época caracterizada por las turbulencias derivadas de conflictos crecientes, la existencia de estas armas y su inclusión en las doctrinas de seguridad y defensa de algunos países, constituyen una amenaza común para la humanidad.
La completa eliminación de las armas nucleares es la única garantía contra su potencial empleo. En tal sentido, la implementación de los compromisos voluntarios y las obligaciones jurídicas en materia de desarme nuclear, incluyendo las disposiciones del Artículo VI del TNP, constituye una deuda histórica cada vez más urgente de parte de los Estados poseedores de este tipo de armas. Ello depende de la voluntad política unánime de todos los Estados, especialmente, de los Estados poseedores de armas nucleares, quienes deben adoptar sin más demoras medidas orientadas al desarme general, completo, no discriminatorio y sin dobles raseros, y con estricto apego a los principios de transparencia, irreversibilidad y verificabilidad.
Aunque observamos con satisfacción los acuerdos alcanzados sobre la base del New Start, seguimos preocupados ante las perspectivas de una nueva carrera armamentista nuclear, incluyendo el uso del espacio ultraterrestre para su despliegue. A tal efecto, Venezuela considera que el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares sigue siendo la piedra angular del régimen de desarme y no proliferación nuclear y que su puesta en práctica, sobre la base de un multilateralismo reforzado, inclusivo, y basado en la Carta de la ONU y en el derecho internacional, puede ser de utilidad capital para contener y disipar estas peligrosas tendencias.
Señor Presidente,
Como Estado no poseedor de armas nucleares, Venezuela siempre ha condenado la producción, el almacenamiento, el uso y la amenaza de uso de las armas de destrucción masiva, incluyendo, las armas nucleares. Esta firme posición, sostenida por décadas, incluso antes de la adopción del Tratado de Tlatelolco, se ha visto favorecida y robustecida por el consenso regional existente desde que la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (CELAC) fuese declarada en el año 2014 como una Zona de Paz.
De allí que, de conformidad con nuestra Diplomacia de Paz y con arreglo a nuestra tradición de respeto y defensa a los principios y propósitos de la Carta de las Naciones Unidas, el Derecho Internacional y el Estado de Derecho, la República Bolivariana de Venezuela ha cumplido ya con las disposiciones del Artículo 2 del Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares, en ocasión de su reciente entrada en vigor el pasado 22 de enero de 2021. Esperamos que este instrumento jurídico nos permita avanzar hacia la eliminación total de las armas nucleares.
Para concluir, desde Venezuela ratificamos nuestra disposición de continuar trabajando de manera constructiva con los miembros de la comunidad internacional para avanzar efectivamente en el proceso de desarme nuclear y para la consecución del objetivo de alcanzar un mundo libre de armas nucleares.