Si en mi casa, descubrían gestos adolescentes indeseables, preventivamente alertaban: “Tas avisao” y tomábamos medidas. Alerto lo mismo a quienes, en los dos bandos, pretenden liderarnos. Prevengo: a la juventud que ansían “dirigir”, en vez de bajar línea, lo válido – y olvidado – en lideres: es escuchar.
Hoy vistos como gestores de los daños colaterales de la descomposición social y política que todos forjamos. Necesitan escuchar voz y nervio de la gente. Con datos e intuición sobre como llegar al final del túnel.
El pueblo acumula vivencias mas precisas que las creadas por narrativas, que solo aplican, mal entendidos textos de la vulgata marxista. Revisen, cuan desfasados, están sus conceptos como para pretender hacerle coaching político a nuestros jóvenes. Debe ser al revés. Poner atención. Bajar con humildad al piso de la calle. Al terreno del pueblo que hemos dejado en el camino. Tirados al deshuesadero de la desigualdad por lideres que han quemando puentes a quienes se deben. Mientras hacen evidente sus conexiones con los menos indicados. Y construyen muros con cementos, y amalgamas que aseguren la desigualdad. Otro sería nuestra sentido de la docencia y la decencia y su fuerza social, si se hubiera canalizado en otro sentido.
Mas apoyada, en donde está el real saber hacer. Ejemplo las utopías de las experiencias de la sabiduría sencilla, cultural y económica que cultivan la unidades comunales. No esperando pasivamente lograr soluciones de cambio en explosiones populares manifestaciones que se mueven con la fuerza del trueno, que cae con furia, pero sin destino ni dirección precisa. Y luego de apagadas, no hay manera de darles forma y orden, pues les faltan principios, filosofía e ideología. Solo sirven para destruir e imponer donde no crece nada nuevo. Solo ideologías invariables y en tiempo de los errores. Sin embargo, el mundo de los desiguales ha sorprendido.
Maravilla!, con fuerza, y dignidad. Muestran el brillo olímpico de los y las: Yulimar, Robelys, Julio, Keydomar, Daniel, Israel, Dalia, Stefany, Yusleidy, Anriquelis, Naryury, Robeilys, Claudymar y Antonio. Esto es alerta. A los sordos a los que nada oyen: “Metro adentro camará”. El pueblo puso “patas arriba” a, Chile. Colombia. Bolivia y Perú. Ecuador, traicionado por un disfraz de Lenin. Es tan novedosa esta línea de progresismo, que hasta a Francia la sorprendieron sus Chalecos Amarillos e Italia con el “Movimiento 5 Estrellas”. Dije, “tas avisao”: en la izquierda, todo hace pensar en renovación.