La ruta de la oposición hacia los comicios del 21 de noviembre ha sido moldeada más por efecto del furor e inadecuada reingeniería política que por la sensatez.
Solo imprecisas jugadas y arrimes que llevan al CNE a anunciar más que una contienda a una rebatiña entre 70.244 candidatos, de ellos 3.082 son del chavismo —uno por cada cargo en disputa— y el resto de los distintos azares opositores.
La mano va por 329 jugadores para las gobernaciones, 4.462 para las alcaldías y 65.000 para las diputaciones regionales y locales.
Esto entrambuca, como dicen por ahí, enardece los tahúres y enerva a todas las facciones opositoras y saca la piedra a los votantes.
En vista del panorama, ofrezco resolver el rollo con el uso del Juego del Alacrán llanero para animar electores y poder seleccionar entre los ganadores a sus candidatos. Ojo: en cada juego solo hay un ganador, los demás que se jodan. Los juegos son propios de niños venezolanos, inscritos:
“Gárgaro Agachao”: Procónsules en México y Miami y Madrid: PJ (Borges-Capriles), VP (López-Guanipa), NT (Rosales), AD, en el exilio, (Ramos). Todos con franela del Club de Ex-Amos del Valle. Si los sifrinos prefieren se puede llamar: “One, Two, Three, Pollito Inglés”.
“A la víbora de la Mar”: Derecha de Fedecámaras, aislada para evitar virus e incrédula con $G$4$, que jala a Lorenzo y seduce con Miraflores.
“Carga la Burra”: Progresismo Avanzado (Falcón) y sus “alacranes”, AD (Bernabé), PJ + VP + Copei+ V. Unida + Ecológicos + Visión V+ Compromiso, Bandera R+ UPP89 + Opina+ Soluciones + Movimiento R + Nuvipa + MAS + MIN + Alianza Centro.
“Metras: pepa y Rolo” o “Bridge”: Los extremistas y come candela (Mery Corinne) Ledezma, Velázquez, que piden una Base del Comando Sur en Caruao y afiliarse a la Unión Europea, -después de la invasión- Ni Blinken les para bolillas.
“El que le caiga la Chupa”: Alternativa Pop: PCV + PPT + Tupamaros + Redes + Izquierda Unida+ NCR+ 100 partidos sin apelación de origen.
“Palito Mantequillero”: Disidentes de izquierda que todavía no articulan su discurso con la izquierda latinoamericana, razón por la cual no han construido fuerza real para ser factor favorable del mundo del proletariado en la negociación.
