La Sala Penal del Tribunal Supremo de Justicia confirmó las condenas impuestas contra dos funcionarios policiales acusados de golpear con un madero a un chofer que hacía la cola para surtir combustible.

Tal decisión está contenida en la sentencia 234 redactada por la magistrada Carmen Marisela Castro y firmada por sus colegas de la Sala Penal, Elsa Gómez y Maikel Moreno.
Los hechos ocurrieron el 30 de mayo del año 2020 en Chivacoa (Yaracuy).

Ese día, Wilmer José Acosta Heredia llegó a las 8 am a la estación de servicio La Maracaibo, ubicada en la autopista centroccidental Cimarrón Andresote, tramo Chivacoa, para surtir combustible. Wilmer cargaba una camioneta donde llevaba 2.000 kilos de aguacate que debía entregar en Acarigua y Guanarito (Portuguesa). Pasadas ocho horas de cola, Wilmer le solicitó la colaboración a Maryerly Díaz, funcionaria de la Alcaldía de Chivacoa, para que le equiparan de gasolina porque la mercancía se podía dañar debido al sol que había soportado. La funcionaria le dijo que no había chance para echar gasolina a ningún productor. Seguidamente, Díaz le ordenó a los policías municipales que se llevaran preso a Wilmer Acosta.

De inmediato, el agente José Julián Mendoza Leal le colocó las esposas a Wilmer Acosta y lo mandó al comando con otro funcionario identificado como Henderson Javier Villegas Rodríguez. Este agente ingresó a Wilmer al retén policial y lo dejó esposado a un tubo de hierro anclado en el patio.

Como a los 20 minutos llego el funcionario José Julián Mendoza Leal, le quito las esposas a Wilmer y le dijo que se colocara contra la pared. Luego, tomó un palo grueso de madera de 15 cm de ancho x 2 m de largo aproximadamente, lo golpeó salvajemente en las nalgas y en los muslos dejándole fuertes hematomas: “Fueron golpes que le ocasionaron que se le salieran las hemorroides y dificultad para caminar’’, describe la sentencia de la Sala Penal.

Una vez culminada dicha acción, el funcionario Henderson Villegas volvió a colocarle las esposas a Wilmer pero esta vez lo obligó a que abrazara el tubo de hierro. Tal posición le causó daño y molestia por el poco espacio que quedaba para trancar las esposas. Los vejámenes cesaron cuando llegó el comisionado Ovidio Crespo, director del Centro de Coordinación Policial Bruzual (Chivacoa) quien ordenó liberarlo.
Por esos hechos, fueron detenidos Henderson Villegas y José Mendoza e imputados por trato cruel y privación ilegítima de la libertad con el agravante de haber obrado con abuso de autoridad.

El juicio contra los aludidos funcionarios transcurrió entre el 20 de julio de 2021 al 7 de junio de 2024. Al concluir los debates y presentación de pruebas el Tribunal 2° de Juicio de Yaracuy declaró culpables a los dos policías de los delitos imputados. En consecuencia, condenó a 20 años de prisión a José Julián Mendoza Leal mientras que 18 años para Henderson Villegas, sanciones que fueron ratificadas por la Corte de Apelaciones de Yaracuy.

Los abogados de los policías acudieron a la Sala Penal y denunciaron que durante el juicio no se valoraron todas las pruebas, ni se declararon a los testigos del hecho. Al respecto, los magistrados desestimaron tal denuncia por carecer de claridad, precisión y objetividad. En consecuencia, dejaron firmes las condenas impuestas a los dos agentes policiales.

VTV/LM/CP  Síguenos en Telegram, Instagram y X para recibir en directo todas nuestras actualizaciones