Un operador de cruceros ha sido acusado de almacenar el cuerpo de un pasajero muerto en un enfriador de bebidas después de que supuestamente se averió la morgue del barco
Robert L Jones, un abuelo de tres hijos de Florida de 79 años, sufrió un infarto fatal a bordo del mega barco Equinox de Celebrity Cruises con su esposa Marylin, de 78 años, en agosto pasado.
Los miembros de la tripulación lo encerraron en una bolsa para cadáveres y lo dejaron sobre una plataforma de madera en el piso de la cámara frigorífica, que no estaba lo suficientemente fría como para detener la descomposición, según los documentos de la demanda presentados en Florida.
La familia asegura que el cuerpo de Robert se pudrió tanto que tuvieron que abandonar su “costumbre de larga data” de funerales con ataúd abierto a pesar de sacarlo del barco después de solo seis días.
Un trabajador de la funeraria local que fue a recoger el cuerpo de Robert supuestamente descubrió que ya se había puesto verde y todavía tenía un tubo de intubación, que a veces se usa para reanimar a los pacientes con ataques cardíacos, que sobresalía de su garganta.
El empleado también encontró ‘bebidas colocadas fuera de la hielera‘, posiblemente para hacer espacio para el cuerpo, agregan los documentos.
La familia de Robert ahora está demandando a la compañía por un millón de dólares, acusando a los jefes de maltratar sus restos de manera ‘imprudente y deliberada‘, sin asegurarse de que la morgue estuviera funcionando y ocultando el hecho de que estaba fuera de servicio.
Han quedado marcados por “imágenes mentales” del abuelo “despojado de su dignidad en el momento sagrado justo después de su fallecimiento”, informa Miami New Times.
Supuestamente, la tripulación del barco también hizo todo lo posible para disuadir a Marylin de sacar el cuerpo de su esposo del barco hasta que regresara a su hogar en Fort Lauderdale.
Algunos informes afirman que un ayudante del sheriff abordó al mismo tiempo y también observó el almacenamiento inadecuado del cuerpo de Robert.
Según la demanda, cuando Robert murió, la tripulación del Equinox le dijo a su viuda que podía sacar su cuerpo del barco en la capital de Puerto Rico, San Juan, o almacenarlo hasta que llegaran a Fort Lauderdale dentro de seis días.
“Los empleados de Celebrity le dijeron a la demandante Marilyn Jones que si llevaba el cuerpo de su esposo a tierra en San Juan, se le exigiría que se quedara en San Juan con su cuerpo y tendría que hacer los arreglos para el transporte de regreso para ella y el cuerpo de su esposo a los Estados Unidos continentales”, reza el comunicado.
Supuestamente, se le dijo a la familia que los funcionarios en San Juan podrían retener el cuerpo de Robert para realizar una autopsia y que el barco tenía una morgue en funcionamiento equipada para manejar tales situaciones.
La familia argumenta que si Marylin hubiera sido informada de que la morgue no funcionaba, podría haber optado por irse a Puerto Rico con el cuerpo y potencialmente tener un servicio de ataúd abierto.
Un portavoz de Caribbean Cruises dijo que la compañía “no puede comentar sobre el asunto por respeto a la familia y debido al hecho de que hay un litigio en curso”.
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