Centenares de trabajadores de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Argentina iniciaron un paro de 72 horas para reclamar una mayor dignificación del trabajo, y aumento salarial. Esto forma parte de una serie de protestas que protagonizan desde inicio del mes de marzo, donde exigen que sean escuchadas sus peticiones, cosa que aún no se ha logrado.

Esta protesta también detuvo las acciones en las plantas de Tenaris y Ternium, ambas pertenecientes a Techint y las de las empresas Acerbrag, Gerdau y Acindar, las cuales ya estaban paradas por la falta de demanda de sus productos, por su parte, el propietario de Techint, Paola Rocca, amenazó con llevar la producción a otros países.

Al inicio de este mes de marzo, el gremio propuso la primera huelga de 24 horas, medida que posterioment5e repitieron, pero por 48. La Cámara Argentina del Acero propuso un incremento del 15 por ciento en diciembre, un 13 por ciento e enero y un 25 por ciento en febrero, pero fue rechazado por los metalúrgicos, que argumentan que la inflación acumulada rebasa fácilmente estos porcentajes.

Argentina, es la tercera economía de América Latina, la cual afronta un severo plan de ajuste promovido por el Gobierno del presidente Javier Milei, que tiene por objetivo alcanzar el equilibrio fiscal.

Milei tiene la expectativa de que así baje la inflación, que en febrero se desaceleró al 13,2 % tras haber llegado en enero al 20,6 % y en diciembre al 25,5 %, el salto mensual más alto en tres décadas, lo que llevó a que el encarecimiento de bienes y servicios escalara al 276,2 % en el último año.