Pablo Iglesias, fundador y líder de Podemos, ha anunciado en la noche de este martes, tras los resultados electorales a la Asamblea de Madrid, que deja la política de primera fila y abandona todos sus cargos en Podemos. «Cuando uno deja de ser útil tiene que saber retirarse», ha asegurado.
Por: El Espectador de Caracas con información de El Economista
«Dejo todos mis cargos. Dejo la política entendida como política de partido, entendida como política institucional. Seguiré comprometido con mi país, pero no voy a ser un tapón para una renovación de liderazgos que se tiene que producir en nuestra fuerza política», ha aseverado.
Su partido, presentado en estos comicios bajo la candidatura de Podemos-IU, ha ganado tres escaños y más de 70.000 votos con respecto a sus resultados de 2019, pero aún así se queda a 14 escaños de distancia de los otros dos partidos de izquierda, con 24 asientos al 99% escrutado.
Sin embargo, el líder de Podemos ha afirmado que su presencia ha llevado a una mayor «violencia» en la política y que se ha convertido en un «chivo expiatorio», por lo que no quiere ser un «tapón» para su partido.
«Hemos constatado en esta campaña un incremento de la agresividad sin precedentes, tanto del PP como de la ultraderecha. Una normalización sin precedentes de los discursos fascistas en los medios de comunicación, amenazas de muerte, deshumanización (…) y mi conciencia absoluta de haberme convertido en un chivo expiatorio que moviliza los afectos más oscuros (…) más contrarios a las bases de la democracia».
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