La ciudad de Nueva York ha decomisado este año casi 7.000 armas de fuego ilegales, según reveló este miércoles el alcalde Eric Adams, que alabó a la policía neoyorquina por sus esfuerzos a la hora de combatir la violencia armada.

Las distintas operaciones policiales de registro y confiscación de armas condujeron además al arresto de 4.400 personas por tenencia indebida, dijo Adams. El alcalde recordó que ahora «le toca al sistema judicial garantizarnos que la gente peligrosa no está en las calles», una indirecta para aplicar la detención preventiva en lugar de la libertad provisional.

Adams dio estas cifras para explicar el último incidente armado de hoy, en el que una agente resultó herida de bala leve en una pierna; la mujer ya tiene el alta médica.

La comisionada de Policía, Keechant L.Sewell, explicó que durante el año la policía neoyorquina ha registrado diez víctimas en nueve incidentes distintos.

Adams aseguró que en Nueva York continúan decreciendo los homicidios y que «la mayoría» los resuelven los detectives policiales, pero no aportó cifras.

El alcalde Adams fue elegido tras una campaña en la que la mano dura contra la delincuencia fue uno de los principales mensajes.

Sin embargo, en este mes de diciembre abundan los artículos en prensa que ponen en duda sus logros al respecto. En estos se subraya su fracaso a la hora de quitar a los neoyorquinos la impresión de creciente peligro en las calles y en el metro.

Con información de EFE

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