La activista estadounidense Medea Benjamin relató cómo fue su odisea para ingresar a la cárcel de Miami en la que se encuentra recluido el empresario colombo-venezolano Alex Saab, acusado en EE.UU. por los delitos de lavado de activos y de ser el testaferro del presidente Nicolás Maduro.
Benjamin es la cofundadora e integrante de la organización Code Pink, y en una entrevista con El Tiempo, reveló que tramitó el permiso para entrar a visitar a Saab por casi dos meses, y luego de “mucho papeleo”, por fin logró conversar con el polémico empresario, que le manifestó estar dispuesto a un canje humanitario.
La activista también contó los detalles para que la justicia estadounidense le permitiera ingresar a dicha cárcel, en la que solamente se le había permitido el acceso a los abogados de Álex Saab.
“Pedí la visita, llené muchos papeles y luego me dieron el permiso. Estuve dos horas en la prisión y hablamos de muchas cosas”, le dijo al medio citado.
Álex Saab le contó detalles sobre su estadía en esta cárcel y también sobre cómo ha sido tratada su familia.
“Él quiso hablar de su estancia ahí, de cómo fue tratado en Cabo Verde y lloró por las cosas que le hicieron en ese país. Pero no solo las cosas que le han hecho a él sino a su familia, las sanciones en contra de sus hijos mayores, que no tienen nada que ver con Venezuela”, relató el empresario.
Además, contó pormenores de la situación que padecen sus familiares y la encrucijada en la que se encuentra, luego de que le propusieron firmar un documento para desentenderse del Gobierno venezolano.
“Han hostigado a la familia, a Camila, su esposa, a quien han chantajeado tratando de quebrarle, diciendo que si firma un papel, si dice frente a la cámara que se desentiende del Gobierno de Venezuela, puede ser un hombre libre. Pero él tiene un compromiso con el pueblo de Venezuela y se mantiene muy firme”, afirmó Saab.
Y agregó: “Yo me sorprendí de la valentía que tiene, el sentido de honor que tiene con su pueblo”.
En cuanto a las acusaciones en su contra, Medea Benjamin contó que el empresario le había manifestado que solo buscaba hallar la manera de llevar alimentos a Venezuela para satisfacer las necesidades de las personas más pobres.
“Él me contó las maniobras que tuvo que hacer solo para hacer llegar la comida a Venezuela, llevando buques, cubriendo los nombres de los buques y otras cosas para poder hacer llegar alimentos, como dice él, a 6 millones de personas”.
Así mismo, la activista le dijo al medio citado anteriormente que Saab padece algunas complicaciones de salud y que la atención que ha recibido no es la mejor.
“También habló de su salud y de que no ha podido tener realmente una visita médica seria, que ha visto al médico en la prisión, pero solo dice que sí tiene la presión muy alta y que debe relajarse y poner los pies en alto”, contó Benjamin.
Además, manifestó que Saab padece algunos problemas gástricos y que también ha tenido algunos episodios de depresión, por lo que el colombo-venezolano pide que se le permita ver a un médico.
Cuando se le preguntó por el semblante que mostraba Saab, luego de saber sobre las complicaciones de salud que padece en Estados Unidos, la mujer dijo que él se encontraba optimista pero que su mayor preocupación eran los medicamentos para tratar una enfermedad que padeció.
“Por apariencia, bien. Estaba muy contento de tener la visita, sonrió mucho. Pero los problemas de salud que tiene no son del todo visibles. Él fue paciente de cáncer, sigue con los problemas del estómago, debe tener una dieta especial y claro que en la prisión no la tiene. Necesita medicamentos especiales y no se los dan” señaló.
La activista estadounidense también aprovechó la entrevista para criticar el tratamiento que se le está dando a este hombre indicando que el tratamiento que se le está dando en esta cárcel no es el justo.
“Hemos estado siempre en la campaña para la libertad de Álex Saab, pero yo confieso que yo no me había enterado de muchos detalles, y una cosa es una protesta y gritar libertad y otra cosa es entrar en una prisión tan gris y ver a este hombre y el mal que está haciendo el Gobierno de los Estados Unidos contra él”, relató Medea.
Y resaltó que: “Él no tenía necesidad de estar trabajando por Venezuela. Tenía un buen negocio en Colombia con 50.000 empleados, era un hombre con mucho éxito en sus negocios y ver a un hombre que en una época tenía todo y ahora está reducido a un hombre en la prisión”.
Del mismo modo, arremetió contra el maltrato que tienen que padecer las personas que se encuentran privadas de la libertad.
“El maltrato que le dan a todos los prisioneros. Me da mucho rencor contra el Gobierno de los Estados Unidos que ha creado un caso contra Saab solo porque pasó algún dinero por bancos de EE. UU. Los Estados Unidos están ejerciendo su fuerza metiéndose en un caso que no tiene que ver con los Estados Unidos, pero hemos visto cómo reconocen a Juan Guaidó y todo lo que han hecho para tratar de cambiar el Gobierno de Maduro. Entendí muy bien cómo es un caso de un prisionero político”, dijo la activista.
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