Lori Vallow Daybell recibió múltiples cadenas perpetuas en prisión sin posibilidad de libertad condicional por la muerte de sus dos hijos y la de la esposa anterior de su esposo, un caso que generó intriga nacional después de que sus hijos desaparecieron hace casi cuatro años.

Vallow Daybell fue condenada en mayo por los asesinatos de sus hijos, Joshua “JJ” Vallow, de 7 años, y Tylee Ryan, de 16, así como por conspiración para cometer asesinato en la muerte de Tammy Daybell. El juez Steven W. Boyce ordenó que cumpliera cadenas perpetuas consecutivas por los cargos de asesinato individual porque los crímenes ocurrieron en diferentes momentos.

Antes de su sentencia, Vallow Daybell se dirigió a la corte alegando que una experiencia cercana a la muerte le permitió comunicarse con el «mundo de los espíritus».

Ella le dijo al juez que sabía “de hecho” que sus hijos y Tammy Daybell estaban felices en el cielo. Tylee y Joshua le comunicaron que están felices después de su muerte, dijo Vallow Daybell.

“Jesús me conoce y Jesús me entiende”, dijo. “Lloro con todos ustedes que lloran a mis hijos y Tammy. Jesucristo sabe la verdad de lo que pasó aquí, Jesucristo sabe que nadie fue asesinado en este caso. Ocurren muertes accidentales, ocurren suicidios, ocurren efectos secundarios fatales de los medicamentos”.

Boyce señaló que la última evaluación de salud mental de Vallow Daybell mostró que sufría de «hiper religiosidad» y «trastorno de personalidad no especificado con características histriónicas y narcisistas», según el juez. Pero también se negó a cumplir con la evaluación ordenada por la corte que puede haber mitigado su sentencia, señaló Boyce.

«Después de toda esta evidencia y juicio, no has mostrado ningún remordimiento», dijo Boyce. «No ha dicho que lo siente. No ha hecho nada para buscar indulgencia de este tribunal».

Ella y su quinto y actual marido, Chad Daybell, fueron acusados de estar obsesionados con las profecías del fin del mundo y creían que las personas podían convertirse en «zombis» poseídos por espíritus malignos.

Los fiscales describieron a Vallow Daybell como una mujer que «eliminaría cualquier obstáculo en su camino» y usaría «dinero, poder y sexo para conseguir lo que quería» durante el juicio de una semana a principios de este año. Su abogado argumentó que ella era una madre amorosa que se interesó en las profecías bíblicas sobre el fin del mundo.

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