El Instituto de Altos Estudios Sindicales (Inaesin) de Venezuela alertó este miércoles sobre el aumento de los casos de depresión entre trabajadores venezolanos y aseguró que se trata de «un problema de salud pública».
Por: El Espectador de Caracas / EFE
«En Venezuela, vemos con preocupación cómo han aumentado los casos de suicidios. Se trata de un problema de salud pública que daña a los trabajadores venezolanos de una forma casi silente», dijo el instituto en un comunicado.
El Inaesin recordó que la depresión puede afectar a «cualquier persona en cualquier momento de su vida», independientemente de su condición social, económica, laboral o familiar y que estas posibilidades aumentan en Venezuela como resultado de la crisis y la «falta de un sustento económico adecuado».
Además, aseguró que «el venezolano vive del día a día de su trabajo, no existen ahorros ni seguridad social» y por ello deciden exponerse a contagios de Covid-19 o a sobrecargas laborales que ponen en peligro sus vidas e incrementan las posibilidades de padecer depresión.
«Entre la conflictividad laboral y el ímpetu de algunos para exigir reivindicaciones laborales, queda en segundo plano la situación de aquellos que, ya sin fuerzas para continuar subsistiendo ante la crisis y sin un sustento económico adecuado para cubrir sus necesidades, deciden poner fin a su vida», manifestó el instituto sindical.
La organización citó un estudio de la ONG Médicos Unidos de Venezuela sobre el estado de salud mental del personal de salud venezolano y destacó que se encontró que, «en promedio, 67 % del personal de salud (bioanalistas, enfermeros, médicos y odontólogos) reportaban síntomas de depresión».