Holanda se encogió de hombros para derrotar a Cuba 4-2 en el juego inaugural del Clásico Mundial de Béisbol el miércoles en Taiwán.

Los holandeses anotaron tres carreras en el sexto inning en Taichung para hundir a Cuba, que por primera vez contó con peloteros de las Grandes Ligas en su equipo.

Didi Gregorius y Josh Palacios anotaron cada uno una carrera para Holanda, que finalizó cuarto en las dos ediciones anteriores del torneo mundial, mientras que Chadwick Tromp anotó dos.

«Es muy, muy importante ganar el primer juego: te quita un mono de la espalda, relaja a todos», dijo el técnico de Holanda, Hensley Meulens.

«Sabemos que tenemos el talento. Sin embargo, hasta que ganas ese primer juego, es como un manojo de nervios».

Palacios abrió un juego empatado cuando conectó un sencillo productor por el medio, antes de que Tromp siguiera con un hit que cayó entre dos jardineros cubanos para aumentar la ventaja de Holanda.

La victoria le da a los holandeses, cuyo roster cuenta con varios jugadores con experiencia en la MLB como Gregorius y Xander Bogaerts de San Diego, la ventaja inicial en un Grupo A que también incluye a Taiwán, Italia y Panamá.

«Son las 12:00 a. m. en Aruba, pero toda mi familia está despierta viendo el partido», dijo Tromp.

«Siempre han estado ahí para mí, y lo estarán de nuevo este año».

Cuba, que terminó subcampeón en el Clásico Mundial de Béisbol inaugural en 2006, anotó sus dos carreras a través de Yadil Mujica.

Cuba está permitiendo que los jugadores de la MLB los representen por primera vez, pero soportaron un día frustrante.

La lucha en el Grupo B comienza el jueves en Tokio, cuando Corea del Sur se enfrentará a Australia y el anfitrión Japón -liderado por el astro de los Angelinos Shoehi Ohtani- se verá las caras con China. Los encuentros de los grupos C y D comienzan el sábado en Phoenix y Miami.

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