El presidente colombiano, Gustavo Petro, anunció que el director de la Sociedad de Activos Especiales (SAE), Daniel Rojas, será el nuevo ministro de Educación en reemplazo de Aurora Vergara Figueroa, el quinto cambio en la renovación del gabinete para encarar la segunda mitad de su mandato.
«El nuevo ministro de educación será Daniel Rojas en reemplazo de Aurora Vergara a la que agradezco su trabajo y dedicación», escribió Petro en un mensaje publicado en la red social X.
El nuevo ministro, que viene de dirigir la SAE, organismo que se encarga de administrar los bienes incautados a los narcotraficantes, es economista de la Universidad Santo Tomás y maestrante en Ciencias Económicas.
Cuenta, según el perfil suyo publicado en la página de la SAE, «con conocimientos en formulación de proyectos, investigación y experiencia en implementación y evaluación de políticas públicas poblacionales y seguimiento a políticas macroeconómicas».
Igualmente ha sido gestor territorial de juventud en el Instituto Distrital de Participación y Acción Comunal de Bogotá (Idpac) y asesor de la Secretaría de Integración Social de la capital colombiana, entre otros.
Vergara Figueroa, entre tanto, duró en el cargo un año y cuatro meses en el que impulsó una Ley Estatutaria de la Educación a la que solo le faltaba un debate para ser aprobada en el Senado cuando se hundió por la presión de Fecode, el principal sindicato de maestros del país, aunque el Gobierno había logrado el apoyo de partidos aliados y de la oposición.
El proyecto de ley representaba un cambio importante porque buscaba ampliar la educación pública de los cinco a los 15 años, que establece la Constitución, a tres grados de preescolar y la enseñanza universitaria, y así actualizar el sistema educativo del país a los estándares internacionales.
«Nuestro esfuerzo siempre estuvo enfocado en garantizar a la niñez y juventud la posibilidad de llevar a cabo una trayectoria educativa completa, continua, de calidad y pertinencia», manifestó Vergara en su cuenta de X.
Vergara agregó que el país «requiere cambios estructurales en el sistema educativo y una base sólida que les permita a todas y todos los colombianos, desde los primeros años de vida, acceder a educación de calidad como derecho fundamental para cerrar las brechas que excluyen y marginan de un futuro promisorio a millones de compatriotas».
Con información de EFE
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