En una intervención de cerca de diez minutos sobre las elecciones de Colombia, ha dedicado el Presidente de una de las más emblemáticas empresas del país -Seguros Bolivar- un poco más de dos de ellos al tema Venezuela, para tocar el asunto electoral de su país. Describió el con serenidad y absoluta certeza, la situación nuestra a fines de los años 90, cuando la menor minoría de los votantes, decidió cambiar las cosas, para conducirnos a que hoy estemos como estamos.

Como siempre he señalado, no intervengo en política colombiana pues esa es una decisión de los ciudadanos del país. Son ellos, con su voto y su abstención, quienes decidirán su destino, al igual que, de similar manera lo hicimos nosotros. Recuerdo en todo caso que, cuando salí a este exilio, me propuse informar a todo el que quisiera escucharme que fue lo que hicimos mal pues es historia y esta a veces quienes detentan el poder quieren cambiarla.

Las élites venezolanas mucha responsabilidad tienen en nuestra actual situación, lo que por cierto omitió el presidente de la referida empresa, pero sobre todo la tienen los que desde el poder -sobre todo el judicial- se plegaron mansamente y en contravía de la Constitución, a las exigencias presidenciales. Si no lo hubieren hecho, el periodo del señor Chávez hubiere culminado el 2 de febrero de 2004, ahorrándonos a todos, adentro y afuera del país, la tragedia que vivimos y que impacta a muchas naciones, pero muy en especial a Colombia pues, no es poca cosa que, en tan poco tiempo, la población del país haya crecido cerca del cinco por ciento como consecuencia de nuestra presencia.

Ningún país es igual a otro; si podemos en todo caso ser parecidos y por ende repetir los errores o aciertos en que cada uno por su cuenta incurrió. Advertir los que los venezolanos cometimos es una obligación irrenunciable que, como otros, me impuse.

Si un país tiene instituciones fuertes, difícilmente lo ocurrido en Venezuela podrá repetirse. Así en manos de ellas es que quedará el destino de todos.

Tengo casi cinco años viviendo en Colombia. Ella ha sido mi casa. Aquí he observado, a pesar de lo que algunos de sus propios nacionales creen, que la institucionalidad funciona, con problemas ciertamente, pero lo hace. Esa fortaleza hasta ahora observada, pudiere ser la garantía que todos esperan si finalmente sus ciudadanos deciden modificar el rumbo del país.

Gonzalo Oliveros Navarro
@barraplural