El gobierno venezolano a lo largo de este año que llevamos en pandemia se ha inventado miles de cuentos –como es su costumbre– para supuestamente combatir a esta enfermedad que ha contagiado a la fechaa más de 136 millones de personas en el mundo y han fallecido casi 3 millones por esta causa.
Primero habló de una molécula (DR-10) que supuestamente era capaz de acabar con el virus, luego fueron las famosas gotas milagrosas (Carvativir). Ahora hablan de producir en el país una vacuna, que aun cuando está en su tercera fase, no ha sido certificada.
Ojo, y no se trata de caer en la simpleza de ese pequeño sector que insiste en querer politizar y polarizar todo. Desde Twitterzuela fuimos testigos de cómo arremetieron en su momento contra las vacunas rusa y china, actualmente avaladas por verdaderos expertos y han resultado no solo ser dos de las mejores, sino que además se encuentran disponibles para su adquisición. Se han venido usando con éxito en Chile y Uruguay.
Siguen haciendo falta –como lo dije hace casi tres meses– unas gotas, pero de realidad. La situación de contagios en el país solo va a mejorar con confinamiento de verdad, conciencia ciudadanay vacunación masiva, lo demás es cuento.
Además de dotar a los hospitales y prestar auxilio a las familias venezolanas, más allá de un pírrico bono, urge un plan real de protección social. Es público, notorio y comunicacional la gran cantidad de venezolanos que claman a diario por ayuda para poder superar el covid-19, lo que deja clara la indefensión de los afectados por la pandemia en nuestra Venezuela y la casi nula eficacia de la acción gubernamental.
Cada vez son más los casos de covid-19 entre familiares cercanos, amistades y conocidos.Somos el país con la tasa más alta de muertes de profesionales de la salud.Tenemos un virus desatado, esta semana con nuevo récordde fallecidos en un día en el país, en el cual además tenemos que entender que el efecto de la vacuna no será inmediato, que es un problema muy complejo que no lo vamos a resolver con simplismos, ni demagogia.
Por ello urge darle respuesta y celeridad a la propuesta presentada por Fedecámaras y apoyada por todo el sector empresarial del país, un plan serio de vacunación, y terminar de entender que llegar a un gran acuerdo nacional de inmunización no es un favor para Maduro y su cúpula, tampoco para Guaidó y su combo. Es una exigencia que reclama nuestro pueblo para evitar más muertes producto de esta enfermedad que ha afectado al mundo entero.
En resumen, todo suma y hace falta, porque para poder llegar a ese plan masivo de vacunación que necesitamos para cubrir al menos 70% requerido, en el que podamos alcanzar la inmunidad de rebaño.
Un virus que llevó a paralizar a las principales economías del mundo, a tener que cerrar países enteros, deja claro la gravedad de lo que ha causado por la pandemia. Por esta razón, desde Unidad Visión Venezuela queremos una vez más apelar a la conciencia ciudadana, sin lugar a dudas esta será nuestra mejor defensa.
Por otro lado el gobierno debe informar con total transparencia para tranquilidad de la población de ese plan serio al cual hago mención, cuántas vacunas más están acordadas con la República de China, cuándo llegan al país el grueso de las 10 millones de vacunas rusas que anunciaron habían sido adquiridas, cuándo tendremos en el país las vacunas conseguidas a través del mecanismo Covax, en fin, hay múltiples opciones para la obtención de las mismas, razón por la cual no tenemos la menor duda de que más temprano que tarde lograremos la solución, porque está más que demostrado que el problema no son las sanciones,que dinero tenemos, por lo tanto somos optimistas. El asunto es simple y llanamente de que haya voluntad política.
Para finalizar, es necesario que desde la Asamblea Nacional aportemos nuestro granito de arena, por ello vamos a proponer de manera formal la aprobación de una ley especial o un crédito adicional, que le permita al Ejecutivo adquirir el número de vacunas restantes que necesitamos para vacunar a cada uno de los venezolanos.