El ministro del Interior de Argentina, Eduardo ‘Wado’ de Pedro, es el elegido por el sector kirchnerista del peronismo para competir en las elecciones presidenciales del 22 de octubre, que estarán precedidas por unas primarias obligatorias para cada coalición el 13 de agosto.
«Recuperemos la esperanza y el orgullo de ser argentinos. Quiero ser tu presidente, el presidente de todas las familias argentinas», anunció este jueves De Pedro, abogado de 46 años, exdiputado e hijo de desaparecidos por la última dictadura cívico-militar (1976-1983), a solo dos días de que venza el plazo legal para que cada coalición informe de sus precandidatos, de los que quedará uno por formación tras las primarias de agosto.
En un video publicado en su perfil de Twitter, De Pedro admitió que Argentina tiene «problemas urgentes» que resolver, en particular el endeudamiento «irresponsable», el «drama» de la inflación y una tasa de pobreza «inaceptable».
Afirmó que se necesita trabajar para desarrollar el «potencial» de las provincias del país, llamó a recuperar la «ilusión» y la «confianza» de la sociedad y prometió esforzarse «como nadie» por su país.
En su mensaje, De Pedro no reveló quién será su compañero de fórmula, tras una jornada cargada de rumores sobre la posibilidad de que su candidato a vicepresidente sea Juan Manzur, gobernador de la provincia de Tucumán (noroeste) desde 2015, exministro nacional de Salud (2009-2015) y jefe del Gabinete de Ministros del Ejecutivo de Alberto Fernández entre 2021 y febrero de este año.
En medio de una particular batalla política en el seno del oficialismo, hasta ahora el exvicepresidente (2003-2007) y actual embajador en Brasil Daniel Scioli era el principal rostro del peronismo que había confirmado su precandidatura, con el aval implícito del presidente Fernández, aunque restaba por conocer la estrategia del influyente sector encabezado por la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner.
Ministro del Interior desde que los Fernández llegaron al poder en diciembre de 2019, De Pedro es uno de los principales referentes del kirchnerismo, una posición que se ha hecho especialmente patente en los momentos de tensión política que se han dado entre las facciones que encabezan el presidenta y la vicepresidenta.
Nacido el 11 de noviembre de 1976, el ahora precandidato presidencial es hijo de Enrique de Pedro y Lucila Révora, militantes desaparecidos y asesinados durante la última dictadura.
Miembro fundador de la agrupación que reúne a hijos de víctimas de la dictadura y con una larga militancia en el campo de los derechos humanos, De Pedro saltó a la política en 2004, como uno de los fundadores de la agrupación kirchnerista La Cámpora.
Ocupó los cargos de vicepresidente de la estatal Aerolíneas Argentinas (2009), miembro del Consejo de la Magistratura (2014) y secretario general de la Presidencia en 2015, durante el último año de gestión de Cristina Fernández.
Su disfluencia le ha llevado a encarar diversas campañas por la igualdad de derechos y la búsqueda de una sociedad basada en la aceptación.
«Me empecé a superar cuando comencé a aceptarme», contó alguna vez De Pedro, quien reveló que fue el fallecido expresidente Néstor Kirchner (2003-2007) quien le impulsó a hablar más en público y a «desdramatizar» la tartamudez.
Con información de EFE
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