Un dolor en el dedo gordo del pie es algo difícil de pasar por alto. Con cualquier movimiento que hagamos, al desplazarnos, sentiremos una aguda punzada. Así que puede decirse que limita bastante las actividades cotidianas.
Por: El Espectador de Caracas con información de Mejor con Salud
Aunque los huesos y las articulaciones de esta zona son pequeños, desempeñan un papel crucial, pues soportan casi todo el peso del cuerpo. Ahora bien, el dolor en el dedo gordo del pie puede deberse a diversos problemas, como los juanetes, la artritis y algunas lesiones.
La importancia del dedo gordo del pie
Para efectos prácticos, los pies se suelen subdividir en 3 zonas:
- El retropié o parte posterior, donde están el talón y el tobillo.
- El mediopié o parte media, que es la zona que abarca el arco en la planta y el empeine en la parte superior.
- El antepié, que estaría ocupado por los dedos, desde el segundo metatarsiano.
Los pies suelen soportar todo el peso del cuerpo cuando estamos parados. Y buena parte de este peso recae en el antepié. El dedo gordo recibe un impacto mayor en comparación con sus otros hermanos.
De manera particular, la articulación metatarsofalángica, que une dicho dedo gordo con el primer hueso metatarsiano, es de vital importancia. Esta es la que permite que el pie se doble, ayudando a impulsar hacia delante cuando nos desplazamos. Sin embargo, también es susceptible de sufrir lesiones.
Enfermedades que causan dolor en el dedo gordo del pie
El dolor en el dedo gordo del pie puede limitar el movimiento y afectar la calidad de vida de la persona. A continuación conoceremos las causas más comunes.
1. Juanete
El juanete es el nombre que se le da a una protuberancia en el lado externo del pie, en la articulación del primer metatarsiano del dedo gordo. Esto se debe a una desviación llamada hallux valgus, en la que dicho dedo cambia su posición en relación con los otros.
Las causas tienen que ver con la forma en como se mueve el pie, así como con afecciones (artritis reumatoide). Junto con la deformidad y el ensanchamiento, se suele observar enrojecimiento y a menudo irritación. Además, puede experimentarse dolor en el dedo gordo del pie al apoyar y al caminar.
2. Osteoartritis
Aunque es más frecuente en rodillas, cadera, columna o en las manos, la osteoartritis puede afectar cualquier articulación, degradando y provocando ruptura del tejido cartilaginoso que recubre los extremos de los huesos.
Entre sus síntomas se encuentran el dolor, la inflamación y la limitación en la realización de los movimientos. En el caso particular de la articulación del dedo gordo del pie, esto puede deberse a problemas de estructura y funcionamiento, resultando en un desgaste.
Cuando se presenta en el pie, la osteoartritis afecta con frecuencia a la mencionada articulación metatarsofalángica, lo que ocasiona dolor en el dedo gordo, así como inflamación. Con el tiempo pueden desarrollarse espolones óseos.
3. Artritis reumatoide
Otros tipos menos frecuentes, como la artritis psoriásica y la artritis reumatoide, también pueden afectar y provocar dolor en el dedo gordo del pie. Esto es más notorio al levantarse o caminar.
Dicho síntoma puede acompañarse de otros, como inflamación y sensación de rechinamiento en la articulación. Además, es posible que con la artritis reumatoide se desarrollen condiciones como el hallux rigidus, en la que se hace difícil enderezar el dedo.
4. Gota
Este es otro padecimiento que puede afectar la articulación metatarsofalángica y provocar dolor en el dedo gordo del pie. La gota es una enfermedad crónica con una incidencia del 2 % en la población mundial.
Su causa está en la hiperuricemia, que provoca la formación de cristales de urato monosódico. Estos se depositan en la articulación. Los síntomas incluyen enrojecimiento, sensación de calor y dolor.
Lesiones que producen dolor en el dedo gordo del pie
Son diversas las lesiones que se pueden producir en el pie. Entre las que causan dolor en el dedo gordo tenemos a los esguinces, las fracturas por estrés, la sesamoiditis y el dedo de césped.
5. Esguinces
Esta es una distensión de la articulación. Un mal apoyo al caer tras un salto, una mala pisada, una arrancada brusca al correr. Dependiendo del grado, se puede producir rotura del ligamento, además de dolor e inflamación.
6. Dedo de césped
Al igual que la lesión anterior, la conocida como dedo de césped está relacionada con los deportes, entre los que cabe mencionar al fútbol, el rugby, el hockey y el fútbol americano. En este caso se producen desgarros o esguinces que se manifiestan con dolor en el dedo gordo del pie.
7. Sesamoiditis
Se llama así a la inflamación de los huesos sesamoideos, que son dos pequeñas formaciones óseas debajo del primer metatarsiano, cerca de la articulación. Es común en los deportistas y ante actividades que involucran saltos (como la danza, la gimnasia, el baloncesto).
8. Fracturas por estrés
Las fracturas por estrés pueden ocurrir por la realización de movimientos repetitivos o el aumento de la intensidad de una actividad física. En este caso, se produce una pequeña rotura en el hueso. Los deportistas suelen estar expuestos a sufrirlas en aquellas disciplinas en las que se sobrecarga el trabajo de las extremidades, como el atletismo.
Tratamientos para el dolor en el dedo gordo del pie
Los tratamientos para el dolor en el dolor del dedo gordo del pie dependen de la causa, así como de la intensidad sufrida. Entre las opciones habituales tenemos las siguientes:
- Aplicación del hielo local.
- Reposo.
- Inmovilización del miembro y mantener el pie elevado.
- Consumo de analgésicos y antiinflamatorios no esteroideos.
- Uso de plantillas correctoras, férulas, calzado ortopédico con soportes de arco.
- Eventualmente, se aplica cirugía para alinear o eliminar espolones óseos.
- Para la gota, el tratamiento apunta a disminuir los niveles de ácido úrico.
¿Se puede prevenir el dolor en el dedo gordo del pie?
En algunos casos, como en las artritis y los juanetes, se puede disminuir la posibilidad de que se presente dolor en el dedo gordo del pie, usando plantillas y calzados que sean flexibles. En los deportes hay que conceder la necesaria atención al uso del calzado adecuado.
Por último, se recomienda mantener un peso saludable, ya que unos kilos extra exigen que el pie se esfuerce más. Una dieta balanceada es particularmente importante en las personas que padecen gota, quienes deben evitar carnes rojas y mariscos, así como el consumo de alcohol.