La delegación venezolana lucirá, sobre uno de los barcos que navegará el Río Senna, durante la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de París, una reinvención del liqui liqui.
Encomendada la misión al diseñador venezolano Raenrra, los trajes azules con ocho estrellas blancas, en falda o pantalón y chaqueta, se complementarán con el tradicional sombrero llanero, con una cinta de ocho estrellas hechas de cristal.
Según lo relató el diseñador, hace cuatro meses fue contactado por el ministerio del deporte, a fin de encargarles el diseño de los trajes para la ceremonia.
“La última vez que una delegación olímpica venezolana lució un traje de diseñador fue a finales de los 80, a cargo de Carolina Herrera. Como este año las Olimpíadas son en París, gracias a que es la ciudad de la moda le dan mucha visibilidad al trabajo en la gala inaugural”.
Explicó Raenrra que quiso hacer “un diseño moderno. Escogí el azul como base porque es muy elegante. Las chaquetas tienen el tricolor en la manga izquierda y el nombre de Venezuela en la derecha. Así que no importa con cuál brazo saluden, siempre se va a saber de dónde son los atletas”.
Le quedó la anécdota de cómo hizo por videollamadas que cada uno se tomara las medidas, debido a que son trajes hechos a la medida. “Se hicieron 76, incluyendo el personal técnico y del Comité Olímpico Venezolano. Fue un trabajo arduo, pero muy satisfactorio, porque siempre es un honor poder acompañar a mi país en momentos tan especiales como este desfile inaugural”.
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