Este Miércoles de Ceniza, miles de fieles católicos en todo el mundo se congregaron en sus parroquias para participar en la misa que marca el inicio de la Cuaresma, un periodo de reflexión y penitencia en preparación para la Semana Santa.
Desde la Basílica Menor Nuestra Señora del Valle, ubicada en El Valle del Espíritu Santo, municipio García del estado Nueva Esparta los devotos participaron en la eucaristía, oficiada por presbítero Andrés Villarroel, párroco de la Basílica, en la cual recibieron una cruz de ceniza en sus frentes como símbolo de humildad y arrepentimiento.
Tiempo para acercarse a Dios
Milagros Vásquez, creyente quien participó en la Santa Misa recordó que el Miércoles de Ceniza es un tiempo de conversión y de ser agradecidos con Dios. “Es tiempo de arrepentimiento para poder recibir a Cristo dignamente en el sagrario de nuestra alma y el mejor regalo que podemos darle a nuestra amada Virgen del Valle es un corazón arrepentido y amoroso de Dios”.
En ese mismo sentido, Edgar Moya, feligrés de la parroquia de El Valle del Espíritu Santo manifestó que esta fecha “significa sencillez, cuando el señor nos hace el llamado al arrepentimiento y a la humildad para estar más cerca de él”.
Renovar la fe
Para Doily Hernández, diputado a la AN por el PSUV, la misa del miércoles de Ceniza es una oportunidad para los creyentes de renovar su fe y prepararse espiritualmente para la celebración de la Pascua.
“Es un momento de oración donde el pueblo venezolano como fiel creyente se une en torno a estos días de Cuaresma para rememorar el viacrucis, las 15 estaciones de Jesucristo en su camino al calvario. Sigamos trabajando por el bien común, por la paz, fortaleciendo la revolución cristiana que es una revolución de amor”, dijo Hernández.
El miércoles de Ceniza es un tiempo en el que los católicos buscan acercarse más a Dios, purificar sus corazones y fortalecer su relación con él.
Información de ÚN