Suplementos alimenticios: cuándo y cómo tomarlos correctamente

Los suplementos alimenticios son productos elaborados a partir de vitaminas, minerales, hierbas, alimentos deshidratados y otros componentes que funcionan para complementar la ingesta diaria de nutrientes. Existen ejemplares para cubrir la falta de vitaminas o de minerales como el calcio y el magnesio.

Pero no todos son iguales. Dependiendo cuál sea el déficit, la forma de consumirlos varía. Algunos son más recomendables de ingerir en ayunas, otros junto a las comidas y otros antes de dormir.

¿En qué casos son recomendables?

En general, una dieta equilibrada y combinada con otros hábitos saludables, como el ejercicio y el descanso, son suficientes para cubrir la demanda de nutrientes del organismo. Sin embargo, hay casos donde los suplementos son útiles y hasta necesarios, siempre que se ingieran bajo prescripción médica.

En personas donde los niveles de ciertas vitaminas y minerales se encuentran bajos, es común que el médico prescriba los suplementos por un tiempo determinado. Las razones pueden ser que se lleve una dieta poco equilibrada o se mantengan bajos por una condición de salud particular. Además, pueden ser útiles en los siguientes casos.

En ciertas condiciones de salud. Las enfermedades crónicas y la edad avanzada pueden producir deficiencias de nutrientes.

Cuando se ingieren ciertos medicamentos. Algunos fármacos interfieren en la alimentación y la incorporación de nutrientes.

En la recuperación de enfermedades. A veces son necesarios durante un periodo posterior a la recuperación de afecciones graves.

Cuando se atraviesan momentos de estrés. Cuando enfrentamos situaciones estresantes es útil reforzar el sistema inmune y la ingesta de vitaminas.

Durante el embarazo o lactancia. Algunos suplementos frecuentes para las madres son el ácido fólico, el yodo, el hierro y las vitaminas D y B12.

En personas con poca exposición a la luz solar. Esta situación suele producir una deficiencia de vitamina D, que puede complementarse con suplementos.

Cuando retorna la actividad intensa. Al finalizar el verano y las vacaciones, puede que el organismo se beneficie con un refuerzo de nutrientes para enfrentar la vuelta al trabajo y al colegio.

Cuando se practica actividad física intensa. Deportistas de elite y personas que ejercitan con intensidad suelen complementar la dieta con suplementos para optimizar el rendimiento y la recuperación.

En los cambios estacionales. Las variaciones abruptas de temperatura, como el regreso del frío con la llegada del otoño, pueden justificar su uso. Existen varios suplementos útiles para esta época del año.

¿Cómo tomar complementos alimenticios?

La ingesta de suplementos varía según las indicaciones médicas, el tipo de producto y las necesidades personales. En este punto, es fundamental seguir las instrucciones del fabricante indicadas en el prospecto de cada fármaco. Hay que recordar que, si bien muchos son de venta libre, no es recomendable adquirirlos sin una consulta profesional previa.

En cuanto a los horarios, también pueden diferir, ya que es mejor consumir algunos en ayunas. Por ejemplo, ciertos suplementos probióticos y aminoácidos. No obstante, la mayoría conviene tomarlos después de comer para reducir el riesgo de padecer problemas digestivos. Las dosis dependen de cada producto, aunque siempre es importante no exceder la cantidad recomendada. Más allá de las consideraciones generales, es posible conocer algunos detalles puntuales de ingesta, según el tipo de nutriente.

Lea la nota completa en Mejor con Salud

Síguenos en TelegramInstagram y X para recibir en directo todas nuestras actualizaciones

Share this post:

Noticias Recientes

El Espectador de Caracas, Noticias, política, Sucesos en Venezuela