Boca Juniors emprendió este miércoles el viaje que podría llevarlos a la ‘Gloria Eterna’ de la Copa Libertadores, en la que se medirá a Fluminense en la final este 4 de noviembre.
Después de los últimos trabajos de preparación del Xeneize, el plantel almorzó en las instalaciones del recinto deportivo antes de salir hacia el aeropuerto.
En medio de centenares de aficionados con camisetas y portando banderas, el plantel dirigido por Jorge Almirón se desplazó en autobús hasta el aeródromo.
Tres autocares, uno con los jugadores y otros dos con directivos, familiares y toda la equipación necesaria, salieron en torno a las 13:50 (hora local) del recinto deportivo hacia el aeropuerto.
Entre los jugadores podían verse caras de concentración y muchas sonrisas ante el reto de la final continental. Además de la alegría por la concentración de los seguidores para despedirlos e insuflarles el último aliento de ánimo.
Por ejemplo, Benedetto -confirmado a última hora como disponible pese a la lesión sufrida hace una semana- iba sentado en primera fila del vehículo grabando en su teléfono móvil los saludos de la gente.
Posteriormente, a las 14:30 horas abordaron un vuelo privado rumbo a Río de Janeiro. Allí el cuadro argentino jugará este sábado la duodécima final de su historia en el máximo torneo de clubes del continente.
Boca Juniors llega a la definición tras una racha de tres eliminatorias resueltas en la tanda de penaltis. Estas fueron ante Nacional de Uruguay, Racing Club y Palmeiras, las cuales solventó a su favor con una gran actuación de su guardameta, Sergio Romero.
Boca busca lograr su séptimo título e igualar así al ‘Rey de Copas’, Independiente, que desde 1984 mantiene su récord de 7 trofeos. Boca Juniors se proclamó campeón de la Libertadores en 1977, 1978, 2000, 2001, 2003 y 2007.
Con información de EFE
Síguenos en Telegram, Instagram y X para recibir en directo todas nuestras actualizaciones