El presidente de EE.UU., Joe Biden, admitió este martes que los precios de la gasolina subirán para el estadounidense común debido a las sanciones contra Rusia, sin que su Gobierno pueda hacer mucho al respecto.
Por: El Espectador de Caracas con información de RT en Español
Al ser preguntado por los periodistas, tras su llegada a la Base de la Reserva Conjunta de la Estación Aérea Naval de Fort Worth (Texas), acerca de qué puede decirle al pueblo estadounidense sobre la situación del precio de la gasolina, el mandatario advirtió: «Va a subir». «No podemos hacer mucho en este momento. Rusia es la responsable«, afirmó.
Su respuesta sigue a una declaración anterior en la que anunció, este mismo martes la prohibición de importar petróleo y gas rusos, en respuesta al operativo militar de Moscú en Ucrania. «Hoy anuncio que Estados Unidos está apuntando a la arteria principal de la economía de Rusia», señaló, detallando que «el petróleo ruso ya no será aceptado en puertos de EE.UU. y los estadounidenses asestarán otro potente golpe contra la máquina de guerra de [el presidente ruso Vladímir] Putin».
Este martes, el precio promedio de la gasolina de grado regular en gasolineras de EE.UU. alcanzó los 4,173 dólares por galón (una medida equivalente a 3,785 litros), según los datos de la Asociación Estadounidense de Automóviles. Con esas cifras históricas, el precio del combustible batió su récord anterior, establecido en julio de 2008 (4,10 dólares por galón).
Por su parte, el viceprimer ministro de Rusia, Alexánder Nóvak, pronosticó este lunes que el rechazo al petróleo ruso «tendrá consecuencias catastróficas para el mercado mundial». «Un aumento en los precios será impredecible: más de 300 dólares por barril, si no más», afirmó.