Tras la detención de cinco personas en Barquisimeto, que coordinaban el traslado de 76 connacionales en dos autobuses desde Táchira hasta la capital larense, Valencia y Caracas, quienes cobraron entre 50 y 200 dólares a los pasajeros, las autoridades están tras la pista de una organización que presuntamente se dedica al tráfico de personas.

Por: El Espectador de Caracas con información de El Carabobeño

Reseña la web del diario tachirense La Nación que, en menos de una semana, los efectivos policiales lograron asestar dos golpes a la presunta banda y a la aprehensión de las primeras cinco se sumaron otras cinco personas. Entre las cuales se encuentra, en calidad de investigado, un efectivo militar.

Pese a que las autoridades no han revelado detalles sobre la investigación, se sabe que los organismos cuentan con información clave. Lograda luego que en el puesto de atención ciudadana Simón Planas, en Barquisimeto, estado Lara, efectivos de la GNB lograron interceptar los primeros dos autobuses que procedían de Táchira con los 76 connacionales que recién retornaron al país desde territorio colombiano.

El caso se agrava por cuanto, al parecer, ninguno de ellos cumplió los protocolos de bioseguridad contra la COVID a su ingreso a Venezuela. Por tal razón, de inmediato se les trasladó al PASI “Villa Bolivariana”, en Barquisimeto, para que se les chequeara y se descartara (o ratificara) algún contagio.

Cinco detenidos más

El más reciente procedimiento, que prendió las alarmas sobre la situación de presunto tráfico humano, se practicó en el puesto de control de El Cucharro, en la salida de San Cristóbal, vía al llano. Donde efectivos de la Policía Nacional Bolivariana lograron interceptar tres unidades autobuseras; que se dirigían a Caracas y Valencia. Con 80 ciudadanos de nacionalidad venezolana, que retornaron al país desde Colombia sin cumplir con las normas de bioseguridad.

Las unidades eran ocupadas por 35 masculinos y 33 femeninas, y 12 menores de edad. Los cuales debieron cancelar entre 70 y 80 dólares para llegar a sus respectivos destinos.

En ambos casos llamó la atención de las autoridades que las unidades de transporte público estuvieran circulando por carreteras y cumpliendo rutas interestatales; a pesar de tratarse de una semana de cuarentena radical. Del asunto se informó al Ministerio Público, que abrió las investigaciones pertinentes.

Prosiguen las averiguaciones

Hasta el momento, hay diez personas detenidas y prosiguen las averiguaciones, que tienen como punto central la zona de frontera del estado Táchira con Colombia. Particularmente las poblaciones de San Antonio del Táchira y Ureña, donde están operando los denominados “arrastradores”; que se encargan contactar a los connacionales recién regresados al país y que, tras logran reunir el cupo, avisan a los conductores de autobús para emprender el viaje, luego del pago de la tarifa en dólares.

También se investiga el caso de las unidades que partieron de La Pedrera, en Táchira. Y la supuesta implicación de funcionarios militares o policiales en la presunta red de tráfico de personas.