En 1972, y bajo la égida de Edgar Faure, quien para entonces se desempeñaba como presidente de la Comisión Internacional sobre el Desarrollo de la Educación, la UNESCO publicó “Aprender a Ser”, un informe que recopilaba los datos más relevantes en cuanto a las prioridades que debían atenderse en este campo y que se convertiría en la inspiración y referencia obligada de todo proyecto educativo.
A partir de entonces cobró especial auge la noción de sociedad educativa, en la que todo podía ser ocasión para aprender y desarrollar las propias capacidades, impulsada especialmente por el informe Delors (La educación encierra un tesoro).
No es de extrañar, pues, que fuera una educadora, la venezolana Andrea Acosta, quien detectara la necesidad de crear un espacio en el que la comunidad pudiera reunirse, compartir ideas y llevar sus proyectos a la práctica.
Con una sólida trayectoria como docente, administradora, coach y artista, Andrea tomó la decisión de mudarse a España en busca de un espacio donde pudiera desarrollarse profesionalmente y conectar con personas de diferentes culturas. Al llegar, identificó una necesidad crucial: la ausencia de entornos que no solo ofrecieran infraestructura técnica, sino que también fomentaran un ambiente colaborativo. Así nació OtroSpot, un lugar diseñado para albergar grabaciones, eventos y actividades creativas, donde la comunidad puede trabajar unida.
“La idea surgió al observar la necesidad de lugares versátiles que combinaran infraestructura técnica y ambientes inspiradores para creativos, formadores y emprendedores. Quería crear un espacio donde las ideas fluyeran libremente y se sintiera el impulso de trabajar en comunidad”, explica.
El compromiso de Andrea con la creatividad y la colaboración ha dado vida a un lugar que ofrece atención personalizada y adapta cada proyecto a las necesidades específicas del cliente: “El trabajo colaborativo es el corazón de lo que hacemos”, afirma. “OtroSpot no es solo un espacio físico; es un socio estratégico en la creación de experiencias únicas. Ofrecemos soluciones personalizadas tanto en producción técnica como en eventos y formación”.
A pesar de los desafíos que ha enfrentado, Andrea ha transformado cada obstáculo en una oportunidad de aprendizaje, consolidando una propuesta innovadora que responde a las demandas del mercado. Explica que el mayor desafío ha sido enfrentar la incertidumbre y la gestión del cambio, especialmente en momentos en que el mercado es impredecible. “También he lidiado con la competencia y la necesidad de consolidar una propuesta innovadora. Sin embargo, cada reto ha sido una oportunidad de aprendizaje y crecimiento, reforzando mi capacidad para adaptarme y seguir adelante”, dice.
Al indagar acerca de su experiencia y de los consejos que pudiera ofrecer a otros migrantes venezolanos deseosos de efectuar aportes a sus lugares de llegada, Andrea sugiere apostar por la diferenciación, por encontrar una propuesta de valor y comunicarla claramente. También es esencial conocer bien el mercado y construir una red sólida de contactos. Y, por supuesto, recuerda que la paciencia es fundamental, ya que los resultados no siempre llegan de inmediato. “Además, recomiendo ser flexible y estar dispuesto a aprender y adaptarse a los cambios”, expresa.
La historia de Andrea y OtroSpot es un recordatorio de que, con pasión y dedicación, es posible transformar visiones en realidades tangibles.
linda.dambrosiom@gmail.com
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