«El samurái es una manera de recordarme quién soy, de dónde vengo y la fuerza que tengo que tener cada día», dijo hace años Fernando Alonso. Nunca ha ocultado su pasión por la cultura japonesa. En especial, con la filosofía samurái, inspiración para el asturiano para afrontar su vida, y sobre todo, sus retos dentro de la pista. No es de extrañar que el español lleve un tatuaje de un guerrero samurái en la espalda. Por ello, antes de uno de sus fines de semana favoritos de la temporada, en el GP de Japón, el español habló de esa conexión que tiene con el pensamiento samurái y reveló sus miedos en una campaña creada junto a uno de los patrocinadores del equipo, la empresa ‘Crypto.com’.
"I never fear anything."
Fernando explores his spiritual connection with Japan’s ancient, feudal samurai warriors, together with @Cryptocom.
Born into a life of focus, dedication and fearlessness.#JapaneseGP #BornBrave pic.twitter.com/m4yaqfzUuU
— Aston Martin Aramco Cognizant F1 Team (@AstonMartinF1) September 20, 2023
“Incluso morir era un privilegio (para los samuráis), no un miedo. En cualquier vuelta, en cualquier momento, en cualquier curva… nunca le tengo miedo a nada. Hay que estar preparado para lo que pueda pasar. Hay que entrenar y estar preparado. Disciplina, la confianza en uno mismo y no tener miedo. Luchamos por un solo objetivo, que es ganar. Hay muchos momentos dentro del coche que sientes que otro es más rápido y no puedes reaccionar”, apunta Fernando Alonso en el citado vídeo promocional, en el que reveló uno de sus pocos miedos.
En la pista, ir a más de 300 km/h no le provoca temor. Tampoco se lo provocó ir a más de 350 km/h por el peligroso óvalo de Indianápolis. Ni ir a fondo entre los peligros del desierto Saudí en su primer Dakar. Ni retar a la lluvia en la temible noche de Le Mans. Al volante nunca tiene miedo. Pero el español, esta vez sí reconoció un solo temor: no es dentro de un habitáculo y sí más general, en la vida. Así lo cuenta el propio Fernando Alonso: “Mi mayor temor es no hacerlo bien, no rendir… no ganar. La vida trata más del fracaso que del éxito y tienes que lidiar con ello para volver más fuerte”.
«No pararé pronto»
“Los samuráis usan esa fe en una batalla, esa rabia que llevan dentro para entrenar más duro. Yo voy a batalla o carrera un poco más preparado”, añade el español.
“En cada inicio de carrera, aunque no seamos lo suficientemente competitivos para luchar por la victoria, hay 1% de mí que, cuando bajo la visera (del casco) y se apaga el semáforo verde, continúa con la esperanza de que ese es el día en que voy a ganar. El 99% de las veces vas a fracasar. Pero la vez que tienes el éxito…”, agrega sobre su persecución de la victoria.
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