La relación entre Alejandra Guzmán y su hija Frida Sofía se ha convertido en toda una polémica, todo esto luego de que la modelo acusó públicamente a su abuelo Enrique Guzmán, de tocar sus partes intimas durante su adolescencia; lo que ocasionó una ruptura inmediata entre madre e hija.
Por: El Espectador de Caracas con información de Revista Ronda
La cantante no se comió el cuento y defendió a su padre y el caso a los tribunales. Por su parte, Guzmán estaba tan decepcionada de su primogénita que la dejó como la guayabera, a lo que decidió dejarle sus» biyuyos» a su sobrino Apolo, hijo de su hermano Luis Enrique.
Sin embargo, el instinto de madre sigue latente, y aseguró que está dispuesta a reconciliarse con Frida Sofía. Pues aún guarda la esperanza que la joven de 30 años, «vuelva y recapacite».
«Hay cosas que algún día, espero, vuelvan a encausarse. Pero hay que dejar que cada quien toque su fondo, que todo mundo aprenda, que cada quien escoja lo que quiere en la vida. Cada quien tiene eso que hacer en la vida», expresó Alejandra durante una entrevista para el programa Ventaneando.
Asimismo, la intérprete de Yo te esperaba afirmó que está dispuesta a olvidar el pasado: «Siempre tendré mi corazón abierto. Sé que existe un hilo, que es el cordón umbilical, y eso nunca va a dejar de estar unido».
Asimismo, reflexionó y recordó que cuando joven también tuvo esas actitudes con su madre: «Si soy una mamá que le duele lo qué pasa. Claro que soy sensible; pero sé que algún día va a volver, sé que algún día va a abrir lo ojos y se va a dar cuenta porque, algún día, también le reclamé a mi madre cosas».