Miembros de una banda delictiva que durante varias semanas comercializó y aplicó supuestas vacunas de Sputnik-V y Sinopharm a más de 2.000 personas fue desmantelada, informaron el fin de semana autoridades del estado Lara, ubicado a unos 400 kilómetros al oeste de Caracas.
Por: El Espectador de Caracas con información de VOA
Desde hace varias semanas, diversos sectores, especialmente miembros de las sociedades científicas en Venezuela, han manifestado preocupación ante el incremento de casos de venta de vacunas contra el COVID-19 en el mercado negro y han solicitado a la Fiscalía abrir una investigación.
La situación genera ahora mayor alarma ante la detección de casos de estafa. Según Javier Cabrera, secretario regional de Salud del estado Lara, los miembros de la banda preparaban ampollas con “agua hervida y algún analgésico” con el propósito de generar reacciones entre quienes recibieron las dosis.
Una mujer que pidió resguardar su identidad confirmó a la Voz de América que pagó 150 dólares por recibir las supuestas vacunas. Luego tuvo sospechas cuando comprobó que su carnet de vacunación era diferente al de personas conocidas que habían sido vacunadas en otras ciudades.
“El incremento de casos y ver que todo va tan lento te lleva a buscar alternativas, lamentablemente resulté perjudicada”, dijo la mujer.
Huníades Urbina, secretario de la Academia Nacional de Medicina, había advertido la semana pasada que diariamente en las consultas privadas escuchan casos de familias que pagan hasta 200 dólares por persona por vacunarse y, en algunos casos, no son inmunizados.
“Una familia entera, se fueron a hacer los antígenos para viajar el domingo a Estados Unidos después de haber recibido las dos supuestas dosis y no tienen antígenos. Les están poniendo vacunas que al sacarlas de la cadena de frío se inactivan o alguien sin conciencia está agarrando los frasquitos vacíos, los llenan de cualquier cosa”, detalló en rueda de prensa.
Las sociedades científicas continúan exigiendo mayor transparencia y organización en las jornadas de vacunación que el Gobierno del presidente Nicolás Maduro inició a finales de mayo y que el sábado comenzó a inmunizar con la vacuna cubana Abdala aún cuando todavía es candidata a certificación y no cuenta con aval de la Organización Mundial de la Salud.