Nuestra vida cotidiana está llena de pequeños misterios, como los agujeros en los bolígrafos BIC, que a menudo pasan desapercibidos debido a su frecuencia. Seguro que en algún momento te has preguntado: ¿por qué las galletas tienen esos pequeños agujeros?
¿Por qué las galletas tienen agujeros?
Si disfrutas de la repostería, puede que ya conozcas la respuesta. Para quienes no, aquí está la explicación de por qué las galletas llevan esos orificios.
Cuando horneas una galleta sin esos agujeros, no se cocina correctamente. Estos huecos permiten que escape el vapor generado durante el horneado. Sin ellos, la galleta se inflaría y perdería su forma plana. Los agujeros ayudan a que la galleta sea crujiente al evitar que retenga humedad.
La cantidad y distribución de los agujeros varía según el tamaño y la forma de la galleta. Es fundamental que haya suficientes agujeros para evitar la formación de burbujas de aire, lo que resultaría en una galleta imperfecta. Las fábricas colocan los agujeros de manera simétrica para que resulten estéticamente agradables. Si horneas en casa, usa un tenedor para pinchar la superficie, como se hace con la masa de hojaldre o masa quebrada.
Si eres amante de las galletas, te interesará saber que la primera receta documentada de galletas proviene de un romano llamado Apicio. Describe unos panes del norte de África, horneados dos veces para deshidratarlos. Para hacerlos menos duros, el Chef romano les practicaba unos cortes, los remojaba en leche y los volvía a hornear. Al retirarlos, los espolvoreaba con pimienta y miel.
También es curioso el origen de la palabra «galleta». Proviene del francés «galette», que se refiere a un pastel redondo y plano hecho de alforfón. «Galette» deriva de «gal», que significa piedra. Así, «galette» hace referencia a una piedra pequeña o un guijarro, lo que sugiere que el pastelito redondo se asemejaba a un guijarro en su forma.
Con información de Super Curioso
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