¡Para llorar a moco tendido, patalear de la impotencia y reprocharle al mundo todas sus desgracias! El actor español Miguel Herrán, mejor conocido por su rol de «Río» en la popular serie de Netflix «La casa de papel», perdió su vivienda a causa de un incendio que redujo todo a cenizas y escombros.
Por: Espectador de Caracas con información de Chévere.life
«¡No lo puedo creer! ¡Hostia! ¡Mi p*ta casa!.. ¡No!», exclamó el actor a través de sus historias de Instagram que se publicaron y viralizaron este fin de semana. Igualmente, se denota los jadeos de ansiedad y el crujido de los vidrios rotos.
El consternado artista grabó el siniestro desde una puerta de vidrio. Una vez neutralizada la amenaza, Herrán se adentró en su casa para registrar las cosas que se perdieron.
En principio, se puede ver un viejo Porta-cds, estanterías carbonizadas y restos de vidrio en las áreas comunes, además de otros objetos completamente inutilizables.
Sin bajas que reportar
Por lo visto Miguel Herrán pudo salir ileso del accidente, o por lo menos así lo confirmó a la revista Hola recientemente.
“Me ha pillado dormido y me he despertado con el ruido de mi casa ardiendo. He salido por la ventana de mi habitación”, aseguró durante su contacto con el medio de comunicación.
En otras historias de Instagram, recalcó que no hay muertes que lamentar, incluso sus mascotas están bien y ha encontrado consuelo en ellas.
“Las pérdidas han sido únicamente materiales. Y como dice un buen amigo mío, problemas del primer mundo (…) Gracias a todos, en especial a los bomberos de Ávila y a la seguridad de mi organización”, expresó, sin embargo, aún no se han detallado las causas del accidente.
«Fuerza, es tremenda la situación, por eso fuerza», «No invirtió 10 euros en alarmas de humo en cada cuarto. En Escandinavia (región europea) es obligatoria tenerlas y cambiar las baterías cada 2 de enero. Sentido pésame, al menos no murieron mascotas, que es lo peor de un incendio», «Cuanto lo siento. Pobre Miguel», fueron algunas de las reacciones de los internautas ante el fatídico suceso.