Una vez por semana el fanático del fútbol escapa de su casa y asiste al Estadio Olímpico de la UCV, su hogar histórico.
Por: El Espectador de Caracas con información de Meridiano.net
Aquí se flamean banderas, suenan los pulmones, los tambores, llueven los gritos desde las tribunas y las gradas; la ciudad se desvanece, el día a día se olvida, en este templo del fútbol que cumple hoy 70 años de venezolanos mirando deportes.
Aunque sus mejores historias se reparten en el siglo pasado. La desidia hizo mella en uno de los templos del fútbol que fue construido por el arquitecto Carlos Raúl Villanueva e inaugurado bajo el mandato de la Junta Militar de Gobierno de 1948 con motivo de los Juegos Bolivarianos de 1951, único de Venezuela en ser patrimonio de la humanidad.
La nota del estadio que sería la sede los Juegos Boliviarianos / Cortesía: Caracas en Retrospectiva
Este templo para el deporte tuvo en sus entrañas eventos magnánimos como los Juegos Bolivarianos, mundialitos y finales de Copa América.Pero el Olímpico tuvo una época de sufrimiento reflejado en el exilio forzoso de la propia Federación Venezolana de Fútbol que lo ignoró por 17 años.
La Vinotinto, que había jugado allí su primer partido de un premundial el 30 de mayo de 1965, se había olvidado de su templo predilecto.
Por eso, la frase «hogar histórico» aturde a la mayoría de fieles hinchas de la selección venezolana. Tantos años estuvo la selección sin jugar aquí que la frase no tiene el peso histórico que debería, pero nadie le puede quitar lo vivido en sus tribunas.
El bautizo de Venezuela.
La selección de Venezuela tuvo en este predio su primera victoria en Eliminatorias. Ocurrió en 1981, ante Bolivia, 1 a 0. Gol de Pedro Acosta. El Olímpico después de aquella victoria vivió una etapa de exclusividad con la selección hasta 1985 donde compartió con San Cristóbal la sede del fútbol y desde entonces no volvió a tener un lugar fijo.
Suma aquí 31 partidos y junto a su hermano, el Brígido Iriarte, (12) hace a Caracas la ciudad que más partidos ha visto de la selección con 43 duelos.
70 años después continúa añadiendo más páginas y peregrinaciones de fanáticos. Su última gran hazaña con la selección de Venezuela fue el 17 de noviembre de 2020. El Olímpico se convirtió en el único estadio en registrar una victoria sobre Chile en suelo venezolano. Se ganó 2 a 1 con goles de Luis Mago y Salomón Rondón.
El último partido de Venezuela fue este mismo año en la derrota contra Perú 1 a 2. La última victoria se dio ante Ecuador con un golazo de Eduard Bello de tiro libre.
La pandemia y el estado de los servicios públicos en el país le dio al Olímpico la exclusividad de la selección venezolana de fútbol desde el 2020, pero el Olímpico es una estadio con demasiadas historias, 70 años deja mucho para contar.
Del mundialito al secuestro de Di Stéfano.
El Olímpico de la UCV tiene en sus cimientos todavía cada memoria vivida por los venezolanos que recorrieron sus tribunas y sus gradas.
En la década de 1950 fue un búnker para los equipos europeos en la postguerra y patio de recreo para los sudaméricanos. El Real Madrid de Di Stéfano, el Inter, el Barcelona, Milán jugaron aquí y estuvieron también acompañados por lo mejor del continente americano: el Santos de Pelé, Flamengo, Botafogo o River pisaron e intercambiaron banderines en este estadio.
La Pequeña Copa del Mundo de Clubes, precursora del Mundial de Clubes FIFA, se jugó en el Olímpico. El Madrid la ganó dos veces, en 1952 en la primera edición y en 1956 la última. Al regresar, el equipo blanco a España la gente se acercó al aeropuerto de Barajas a celebrar con el equipo un trofeo que los hacía dueños del mundo.
El torneo no volvería al Olímpico hasta 1963 cuando Alfredo Di Stéfano fue ¡secuestrado en Caracas!
Di Stéfano en el Real Madrid /Archivo AFP
El secuestro duró setenta horas y luego tuvo Di Stéfano que jugar contra el Sao Paulo, pero Evaristo lo reemplazó en la segunda mitad, porque no podía más. Durante el secuestro solo pudo comer dos perritos calientes, cuenta el cronista español Alfredo Relaño.
No obstante, la FIFA después no reconocería esta copa de manera oficial y el primer Mundial de Clubes para la máxima organización del fútbol fue el celebrado en el año 2000.
La Copa América.
El estadio tuvo su primera aparición en Copa América en 1975. La cancha sirvió para la primera final disputada en suelo venezolano entre Perú y Colombia. Ambos países tuvieron que ir a un desempate que se disputó en el Olímpico. El equipo peruano liderado por Cubillas y Sotil ganó a los colombianos 1 a 0, en la primera final disputada en el país.
Fotografía del estadio Olímpico de la UCV / Getty images
Además, Venezuela fue local en esta edición de Copa América y disputó todos sus partidos aquí. Su primer juego fue contra Brasil y perdió en el Olímpico 0-4. Después, recibió a Argentina donde con goles de Kempes, Luque y Ardiles perdería 0-3.
Después, el país tuvo que esperar 46 años para vivir otra Copa América. En 2007, Venezuela fue el anfitrión de la Copa, pero el Olímpico no fue un recinto de envergadura. Este histórico estadio solo registró un partido: el juego por el tercer lugar entre México y Uruguay.
Más allá del fútbol.
Aparte del fútbol, el estadio fue casa de los Juegos Bolivarianos, Centroamericanos y del Caribe. Además, tuvo el honor de ser anfitrión de los únicos Panamericanos que se disputaron en Venezuela, en 1983.
Aquel evento dejó la estampa y las huellas de Michael Jordan caminando por la pista de tartán con la selección de baloncesto que jugó sus partidos en el Poliedro de Caracas.
Incluso podemos meter temas fuera del fútbol. Aquí se recuerdan muchas elocuentes misas, la primera visita papal de Juan Pablo II y muchos conciertos de artistas internacionales. Este estadio tiene historia, aparte del fútbol.
En las gradas y en su cemento arden las velas de sus 70 años de historias acompañando al hincha venezolano que hace su peregrinación a este templo deportivo.
