El coordinador de la Asociación de Expendedores de Licores en Valencia, Luis Roberto Castro, señaló este 14 de diciembre que, 1200 establecimientos del sector cerraron sus puertas desde octubre de 2019. Como consecuencia de los altos impuestos, el incremento en los precios de los productos y la caída en las ventas por las restricciones del COVID-19.

Castro señaló que existe preocupación en el sector por los constantes aumentos en el cobro de impuestos y las restricciones anunciadas para el próximo mes de enero. Hecho que dijo podría incrementar el cierre de expendios de licores.

“Los impuestos nos están matando. El Instituto Municipal del Ambiente nos está matando, las multas y los intereses nos están matando, estamos ahogados. A esto le sumamos las restricciones de la pandemia, ya han cerrado más de 1200 expendios de licores de los 4.000 que habían. Lo que equivale a 40% de los establecimientos y la tendencia es al alza, es decir el próximo año podrán ser 1.600”, dijo.

El coordinador de Asodel indicó que algunos expendedores de licores tuvieron que migrar a otros rubros para poder generar ingresos durante la pandemia por COVID-19. Señaló que las ventas cayeron más de 70%.

“Nos hemos convertido en campeones de la improvisación, científicos de la locura, así ha pasado con el que tenía una licorería y la transformó en una panadería, pero no es panadero, la economía del país cambió completamente, nos obligaron a cambiar, no es la idea”, expresó Castro.

El vocero del sector señaló que desde 2019 intentan reunirse con las autoridades municipales y locales para tratar el tema de los impuestos y no les han dado una solución.