El terrorista venezolano Ilich Ramírez Sánchez, alias Carlos «El Chacal», no recurrirá ante el Supremo la nueva condena a cadena perpetua dictada por el Tribunal de lo Criminal de París, la tercera contra él, al tiempo que solicitará el traslado judicial a su país de origen, Venezuela, para cumplir las penas.
Por: Espectador de Caracas con información de 800 Noticias
Así lo aseguró su abogada, Isabelle Coutant-Peyre, tras la lectura de la sentencia que condenó a su cliente por el atentado con una granada cometido el 15 de septiembre de 1974 en una galería comercial de París, donde murieron dos personas y 34 resultaron heridas.
La letrada aseguró que ha recomendado a Carlos, que está en prisiones francesas desde que fue detenido por los servicios secretos galos en Sudán en 1994, no apelar esta nueva condena, porque así pone fin a su periplo jurídico en Francia.
De esta forma, agregó, se abre la posibilidad de que Venezuela reclame el traslado de Carlos a su territorio y pueda cumplir allí el resto de la condena, o ser puesto en libertad si así se acuerda.
«Es un procedimiento entre Estados. Venezuela tiene que hacer la demanda. Solicito a Venezuela que pida el traslado», señaló la abogada, quien recordó que su cliente se ha expresado en varias ocasiones a favor de regresar a su país de origen.
Si Caracas lo hace, tendría que ser aceptado por Francia y habría negociaciones para determinar si en su país podría ser puesto en libertad, al haber cumplido ya más de 27 años entre rejas, explicó.
Camisa blanca, chaqueta azul claro y elegante pañuelo al cuello en esta segunda jornada del juicio, Carlos reconoció durante la sesión haber matado en su vida a 83 personas, «muchas, pero no suficientes», en un contexto de guerra y lucha revolucionaria.
Coutant-Peyre indicó, además, que tiene previsto denunciar a Francia ante el Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo por este caso, ya que en su opinión no se ha cumplido el plazo razonable para juzgar este proceso, al tiempo que se mostró convencida de que ganarán ese caso.
La abogada consideró «sin sentido» este último juicio de Carlos en Francia, en el que los jueces debían exclusivamente determinar la pena, ya que el Supremo había establecido ya la culpabilidad del terrorista venezolano.
Como hizo durante los dos días de vista oral, estimó que «la condena no se corresponde con una buena Justicia» y calificó de «ilegal» el proceso, que la Justicia francesa había cerrado en 1988 y considerado prescrito diez años más tarde.
Pero fue reabierto en 1995 y, tras una larga instrucción, Carlos fue condenado en primera instancia en 2017 a cadena perpetua, condena confirmada en Apelación al año siguiente y, tras una orden de revisión de esta por parte del Supremo, reafirmada de nuevo.
La abogada señaló los errores cometidos por la Justicia francesa en todos los casos referentes a Carlos: «De base todo está lleno de errores. Empezando por su detención, la de un ciudadano venezolano, por agentes franceses en territorio de Sudán», dijo. EFE