El Comité de Investigación de la Federación de Rusia está investigando si los terroristas islamistas tienen vínculos con los servicios especiales de Ucrania, y su posible implicación en el atentado a la sala de conciertos de Crocus City Hall, en Moscú.

El ente reveló que la investigación logró obtener los datos de los teléfonos móviles de los acusados del ataque, pese a que los agresores intentaron destruir los dispositivos.

Durante las investigaciones –cita Prensa Latina– , se descubrió que en el segundo aniversario del inicio de las operaciones militares de Rusia en Ucrania; uno de los implicados en el ataque terrorista revisó diferentes sitios de internet y envío capturas de imágenes de las entradas del Crocus City Hall

Estos datos los confirmó el acusado en su testimonio, y también fueron descubiertos en su teléfono móvil.

“En el teléfono del terrorista fueron halladas imágenes fotográficas de personas vestidas con uniforme camuflado con una bandera ucraniana sobre un fondo de casas destruidas y un sello postal ucraniano con un gesto obsceno. Los datos especificados pueden indicar una conexión entre el acto terrorista cometido y la operación militar especial”, refiere el informe.

Cabe recordar que, hasta la fecha, se encuentran detenidas 19 personas por su implicación en el ataque. Del total, cuatro fueron el autor directo.

El presidente ruso, Vladímir Putin, reconoció que el ataque fue obra de islamistas radicales, pero supuso que podría ser un eslabón en una cadena de operaciones que se llevan a cabo contra Rusia desde 2014 “con las manos del régimen neonazi de Kiev”.

El pasado 26 de marzo el jefe del Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB), Alexandr Bórtnikov, aseguró que las fuerzas de Ucrania están involucradas de manera directa en el ataque terrorista, el cual se acreditó el grupo terrorista ISIS.