La aclamada serie de Netflix, The Crown, que narra el reinado de la reina Isabel II, llega a su fin el jueves y se centra en un tema aún muy sensible para la monarquía británica: la muerte de la princesa Diana.
La sexta y última temporada del galardonado pero a menudo criticado programa creado por Peter Morgan se estrena en dos partes.
Los primeros cinco episodios se estrenarán el jueves, seguidos de los cinco últimos el 14 de diciembre, culminando 60 horas de narrativa que comenzaron en 2016.
El drama cubre el viaje de la difunta reina desde su matrimonio con Felipe en 1947 hasta la presentación de Kate Middleton, la actual Princesa de Gales, a principios de la década de 2000.
Esta temporada describe las últimas semanas de la vida de la princesa Diana, luego de su tumultuoso divorcio del ahora rey Carlos III, que condujo a su trágico fallecimiento el 31 de agosto de 1997.
Perseguido por paparazzi, el BMW que transportaba a Diana y su amante Dodi Al-Fayed se estrelló a gran velocidad contra un pilar en el túnel Alma de París, matando a ella, a Fayed y al conductor Henri Paul.
La familia real tardó años en recuperarse tras las críticas por su reacción ante la pérdida de Diana, a quien Tony Blair apodó «la princesa del pueblo».
«Es un tema muy delicado porque fue un evento muy significativo en la vida de la monarquía y la familia real, y porque las personas relacionadas con Diana todavía están vivas, sobre todo sus hijos, ahora adultos, William y Harry», dijo el historiador real. dijo Ed Owens a la AFP.
«Es el momento fundamental que la serie se ha ido acumulando desde la primera temporada. La pregunta sigue siendo si Peter Morgan es un amigo o un enemigo de la monarquía.
«Esta serie nos permitirá comprender mejor si cree que es una institución que ha cometido grandes errores y que necesita modernizarse, o si es una institución que ha logrado modernizarse con éxito desde 1997».
- Gran responsabilidad –
La última temporada recrea notablemente el raro discurso televisado en vivo de la reina Isabel desde el Palacio de Buckingham el 5 de septiembre de 1997, rindiendo homenaje a Diana y abordando el dolor público generalizado.
Imelda Staunton, quien interpreta a la monarca en las dos últimas temporadas siguiendo a Claire Foy y Olivia Colman, expresó sentir «una enorme responsabilidad» con esta escena.
«Fue un discurso increíblemente poderoso a la nación que mucha gente recuerda», dijo la actriz.
«Ninguno de los involucrados tomó a la ligera la importancia de esto, y pasé mucho tiempo escuchando grabaciones del discurso real, ya que necesitaba ser lo más preciso posible con un tema extremadamente delicado».
Diana, figura de los medios y amiga famosa, ganó popularidad mundial al mostrar empatía hacia los menos afortunados.
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