Hoy 15 de noviembre se celebra el Día Mundial Sin Alcohol, fecha establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la que se pretende concienciar a la población sobre los daños que provoca el consumo de alcohol.

El alcoholismo es una enfermedad que ha matado a millones de personas en todo el mundo, además de dejar con problemas de salud a casi la misma cantidad de mujeres y hombres.

Uno de esos problemas es la intoxicación, por eso te dejamos los síntomas que sentirás si lo consumes en exceso.

Cuando se produce una intoxicación hay tanto alcohol en la sangre que funciones vitales básicas como la respiración, el ritmo cardíaco y la regulación de la temperatura en el cuerpo comienzan a fallar.

Puede causar daño cerebral permanente o la muerte.

Los síntomas de la intoxicación por alcohol pueden ser:

Confusión
Dificultad para mantenerse consciente
Vomitó
Convulsiones
Dificultad para respirar
Ritmo cardíaco lento
Piel fría y húmeda
Respuestas obstaculizadas
Falta del reflejo nauseoso (que evita la asfixia)

Cuando se produce una intoxicación por alcohol, es muy peligroso pensar que la persona inconsciente estará bien si duerme hasta que los efectos desaparezcan, ya que podría ahogarse en su propio vómito y morir por falta de oxígeno. Incluso si la persona sobrevive, puede causar daño cerebral a largo plazo.

El consumo excesivo de alcohol es causa directa de 60 enfermedades y factor de riesgo para otras 200, además de accidentes, principalmente de tránsito, lesiones, violencia y enfermedades de transmisión sexual como el VIH. /SIDA, tuberculosis, cáncer y muerte.

El alcohol puede provocar que la persona que lo consume tenga efectos negativos en su calidad de vida y bienestar, como violencia doméstica, bajo rendimiento académico o laboral, problemas con familiares y/o amigos e incluso problemas financieros.

El consumo excesivo de alcohol conduce y está relacionado con una gran cantidad de trastornos y enfermedades, entre ellas:

Adicción y dependencia.
Aumento de la presión arterial
Posibilidad de desarrollar tipos de cáncer.
Daño cerebral
Problemas de memoria
Daño a las membranas mucosas del sistema digestivo.
Problemas de alimentación
Problemas sociales y económicos.

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