El grupo chií libanés Hizbulá reivindicó este miércoles tres nuevos ataques contra objetivos israelíes en el norte de Israel con los que mantiene el fuego cruzado en marcha desde hace tres semanas.

Alrededor de este mediodía, combatientes del grupo chií lanzaron un primer ataque que tuvo como objetivo un emplazamiento próximo a la localidad fronteriza de Blida que causó «impactos directos en el lado israelí», según una serie de comunicados de Hizbulá.

Por la tarde, realizaron un lanzamiento con «proyectiles de artillería y misiles apropiados» contra el cuartel general del «nuevo batallón Zarit», donde el ejército israelí «concentraba sus vehículos y fuerzas», en Khallet Wardah, que causaron bajas confirmadas, si bien no especificaron la cifra.
Horas más tarde atacaron el emplazamiento meridional de Hadab al Bustan con proyectiles de artillería, de acuerdo con los comunicados publicados por Hizbulá.

Por otra parte, la Agencia Nacional de Noticias (ANN) libanesa informó hoy de que Israel llevó a cabo otros tres ataques en el sur del Líbano.

Según esta misma fuente, una unidad del Ejército libanés, acompañada por la FINUL y la Cruz Roja libanesa, está «buscando a dos pastores que fueron fusilados por las fuerzas de ocupación, mientras pastoreaban el ganado en la zona de Wazzani», fronteriza con el Estado judío.

«La búsqueda se ha detenido por hoy sin encontrar ningún rastro de los dos pastores, pero se espera que las operaciones de búsqueda se reanuden mañana por la mañana, jueves», añadió NNA.

Los enfrentamientos en la divisoria se han recrudecido con el paso del tiempo desde la intervención de Israel en la Franja de Gaza hasta convertirse en un intercambio casi continuo de misiles y bombardeos, que dejan ya 49 muertos en las filas de la formación chií y casi 29.000 desplazados internos solo del lado libanés.

Con información de EFE

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