A pesar de ser señalada en muchas ocasiones como la más “nociva o dañina” de las infusiones, en las diversas investigaciones de la actualidad quedó demostrado que el café, sin beberlo en exceso, tiene beneficios para salud.
Por: El Espectador de Caracas con información de El Nacional
Un estudio científico reciente confirma sus propiedades: tomar hasta cinco tazas de café al día no tiene peligros a largo plazo e incluso podría reducir el riesgo de enfermedades crónicas.
Se trata de un nuevo estudio que fue publicado en julio pasado por el New England Journal of Medicine. Si bien no es una evidencia para aconsejar a todas las personas que tomen café, destaca que este podría formar parte de un “estilo de vida saludable” si no se consume en exceso. La medida puede variar de acuerdo con la salud de cada individuo. Por algunas condiciones particulares, hay personas con recomendación de no consumirlo.
El estudio
Según este trabajo, puede ser beneficioso consumir esta bebida con cafeína para aumentar la energía y estimular el metabolismo. Una gran noticia para quienes disfrutan de una buena taza de café en la mañana o durante la sobremesa. Entre sus beneficios destacan su consumo para reducir la fatiga. También como tratamiento para la apnea del prematuro en lactantes o en analgésicos para aliviar el dolor. Además, resaltaron en el estudio que los adultos eligen predominantemente el café, mientras que los más jóvenes se inclinan por bebidas como gaseosas o té.
“El café como infusión aportan varias cosas: por un lado, la cafeína, que dependiendo de las cantidades puede ser beneficiosa o puede ser perjudicial. El problema es el exceso, eso efectivamente puede generar una sobreestimulación, falta de sueño y también pueden actuar negativamente a nivel gástrico en aquellas personas que tienen tendencia a la acidez o alguna alteración gástrica, por lo que se recomienda no consumir en grandes cantidades”, explica Sol Vilaró, licenciada en Nutrición del Instituto de Neurología Cognitiva.
Agregó: “Por otro lado, la tendencia de este último tiempo es que en consumos moderados de café se encuentra el efecto beneficioso a nivel cardiovascular y cerebrovascular que viene relacionado a los antioxidantes que contiene. Los mismos actúan atrapando sustancian que oxidan y de esta manera protegen a la célula de ese daño oxidativo”.
Beneficios
Esos beneficios que detallan en el estudio se explican por su contenido de cientos de fitoquímicos biológicamente activos, incluidos los polifenoles como el ácido clorogénico y los lignanos, el alcaloide trigonelina, las melanoidinas formadas durante el tostado y cantidades pequeñas de magnesio, potasio y vitamina B3. Estos compuestos del café pueden reducir el estrés oxidativo, mejorar el microbioma intestinal y modular el metabolismo de la glucosa y las grasas. Además, la cafeína puede colaborar en la disminución del dolor cuando se agrega a los analgésicos de uso común. Específicamente, unos 100 a 130 mg de cafeína añadidos a un analgésico aumentaron la proporción de pacientes a los que se les alivió el dolor.
Lo malo
En cuanto a los efectos perjudiciales para la salud, se relacionan -como con cualquier producto- con la altas cantidad de consumo. Esto puede provocar ansiedad, nerviosismo, insomnio, excitación y agitación psicomotora, entre otros. Advierten además sobre el consumo de bebidas energéticas, especialmente cuando se mezclan con alcohol.
“Los hábitos alimentarios que giran en torno del habitual tomador de café suelen generar que uno deje de lado otro tipo de bebidas como las azucaradas, eligiendo el café por sobre ellas. Sabemos el efecto nocivo que las gaseosas y bebidas azucaradas generan en la salud cardiovascular y cerebrovascular, por lo que desde ese punto se puede tomar como un consumo positivo”, resume la licenciada.