El presidente de la UEFA, Aleksander Ceferin, pidió este miércoles eliminar la violencia de algunos hinchas en el fútbol, tras la muerte de un griego del AEK Atenas la semana pasada.

«Este es el cáncer del fútbol y esos no son fanáticos”, declaró en una conferencia de prensa en Atenas con el primer ministro griego Kyriakos Mitsotakis. «Llegamos a una posición en la que tenemos que decir ‘basta’, tenemos que parar esto”, agregó.

Michalis Katsouris, de 29 años y aficionado del AEK Atenas, murió de una hemorragia después de haber sido apuñalado el lunes entre ultras del club croata Dinamo Zagreb y del AEK cerca del estadio del club griego en Nea Filadelfia, en las afueras de Atenas.

«La violencia y el vandalismo no son solo un problema griego”, sentenció Ceferin. También sostuvo que los países, las instituciones y los medios europeos deben trabajar juntos para ayudar a poner fin a la violencia en el fútbol.

Por su parte, Mitsotakis afirmó que «los culpables serán encontrados y castigados” por el crimen, y pidió «un mecanismo europeo para luchar contra la violencia en los estadios y castigar eficazmente”.

La justicia griega imputó y dejó en arresto provisional a 105 personas acusadas de haber participado en los incidentes. Entre ellas, 102 son croatas sospechosos de estar ligados a los hooligans del Dinamo de Zagreb, los Bad Blue Boys.

El primer ministro griego subrayó además que se puso de acuerdo con los cuatro presidentes de los principales clubes griegos para que «la policía opere en los estadios y pueda controlar las entradas».

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