Los Marlins de Miami cerraron con éxito su serie ante los Yankees de Nueva York este domingo 13 de agosto, al concretar una heróica remontada ante el conjunto neoyorquino en el tercer y último encuentro de la serie, para así asegurarse la disputa ante los «Bombarderos del Bronx», y mantenerse en la lucha por la postemporada.
El conjunto de Miami sufrió para ganar una serie en la que los tres encuentros disputados fueron muy parejos, sin embargo, los Marlins hicieron respetar la casa y respondieron en los momentos importantes para sumar triunfos. Uno de los peloteros que justamente respondió en momentos claves de la serie fue el que siempre aparece, Luis Arráez.
Arráez no tuvo su mejor rendimiento en lo que a promedio de bateo se refiere durante la serie ante los neoyorquinos, sin embargo, el camarero criollo supo aparecer en momentos de suma importancia, y terminó siendo totalmente decisivo para el éxito de los suyos.
Hombre «clutch»
En el primer juego de la serie, Arráez no tuvo su mejor noche, al irse de 4-0 en la derrota que sus Marlins sufrieron ante los Yankees. Sin embargo, las cosas cambiaron para los dos siguientes encuentros de la confrontación entre estas dos novenas.
Arráez se fue de 4-1 en el segundo juego de la serie, pero fue totalmente clave para que su equipo se llevara la victoria, al conectar su cuarto cuadrangular de la temporada en la parte baja del primer episodio. Con su batazo de vuelta completa, Arráez impulsó dos carreras que terminarían siendo decisivas, ya que Miami derrotó 3-1 a los Yankees en un auténtico duelo de pitcheo.
Finalmente, el criollo volvería a ser determinante para el tercer y último juego de la serie, en el que Arráez terminaría yéndose de 5-3. El oriundo de San Felipe impulsó tres carreras, y fue uno de los héroes del encuentro. Miami caía 7-3 al iniciar el noveno episodio, pero un gran rally los metió en la pelea. Con el juego 7-5, y con hombres en las esquinas, Arráez conectó un triple para igualar las acciones. Luego, el propio Arráez anotó la carrera de la victoria.
De esta manera, Arráez dejó línea de .308/.308/.692/1.000 en la serie, al conectar cuatro imparables en 13 turnos al bate. El criollo impulsó cinco carreras en toda la serie, y fue sin duda la bujía de unos Marlins que siguen en la pelea por el comodín.
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