El guardameta español Kepa Arrizabalaga fichó este lunes por el Real Madrid, en forma de cesión por una temporada procedente del Chelsea, como refuerzo en la portería tras la lesión de rodilla del belga Thibaut Courtois el jueves pasado. 

«El Real Madrid C. F. y el Chelsea FC han acordado la cesión del jugador Kepa Arrizabalaga, que queda vinculado al club durante esta temporada, hasta el 30 de junio de 2024», anunció el club merengue en un comunicado.

El fichaje ya se había sopesado en 2018. Su cláusula para salir del Athletic Club era entonces de 20 millones; una «oportunidad de mercado» que no se acabó concretando, ya que el francés Zinedine Zidane, entrenador entonces, insistió en su apuesta por Keylor Navas. Seis meses después, Kepa recaló en el Chelsea a cambio de 80 millones de euros.

Con la llegada del técnico argentino Mauricio Pochettino al Chelsea, Kepa fue titular en la mayoría de partidos de la pretemporada, pero el fichaje de Robert Sánchez el pasado 5 de agosto cambió su situación y acabó recalando en el Real Madrid a pesar del interés también del Bayern de Múnich.

«Hubiéramos querido presentar a Kepa hoy o mañana como portero si no se hubiera decidido por el Real Madrid», dijo ayer el director general del Bayern Múnich, Jan-Christian Dreesen, durante la presentación oficial de Harry Kane, el fichaje más caro de la historia de la Bundesliga. Dreesen se mostró comprensivo con la decisión del joven portero. «Kepa es español, es normal que la aceptase», dijo.

El equipo bávaro sigue a la búsqueda contrarreloj de un sustituto para el lesionado Manuel Neuer. «Estamos trabajando, antes del 1 de septiembre podremos presentar a alguien. Pero es importante resaltar que Sven Ulreich ha cumplido cada vez que se le ha necesitado. Si perdimos ayer no fue por su culpa», dijo Dreesen en alusión a la derrota en la supercopa ante el Leipzig por 0-3.

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