Cuatro días después del arranque de la campaña electoral para los comicios del 23 de julio, el presidente del Gobierno español y líder socialista, Pedro Sánchez, y el líder del conservador Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, se enfrentan mañana a su primer debate televisivo, único en toda la campaña, como los dos candidatos posibles a la presidencia del Gobierno.
Ambos políticos debatirán sobre cuatro bloques temáticos, entre ellos políticas de Estado, institucionales e internacional, junto con otros dedicados a economía, política social e igualdad y pactos y gobernabilidad.
Sánchez, que durante sus cinco años al frente del Ejecutivo ha desarrollado una amplia actividad internacional, cerrará el bloque dedicado a esta cuestión y también abrirá el de economía, mientras que Feijóo será el encargado de iniciar el segundo y el tercer bloque.
Se da la circunstancia de que la campaña para estas elecciones coincide con importantes compromisos internacionales para España como es la presidencia rotatoria de la Unión Europea, que comenzó el 1 de julio y se prolongará hasta el 31 de diciembre.
En los días de campaña Sánchez se tendrá que ausentar de la misma para asistir a citas internacionales, como el caso de la próxima semana, que viajará a Vilna a la cumbre de la OTAN, y la semana siguiente, que viajará a Bruselas, donde se celebrará la cumbre UE-CELAC, que reunirá a los jefes de Estado o de Gobierno europeos y de América Latina y el Caribe, y a la que España le ha otorgado gran importancia por las especiales relaciones que mantiene con Latinoamérica.
Las cuestiones internacionales han estado muy presentes en la agenda de Sánchez durante todo su gobierno, entre otras cosas, por cuestiones tan graves como la guerra en Ucrania, tras la invasión rusa de ese país en febrero de 2022.
Sin embargo, Feijóo, que ha desarrollado la mayor parte de su carrera política como presidente regional de Galicia (noreste), carece de experiencia internacional y reconoce como una de sus asignaturas pendientes que no sabe hablar inglés, lengua en la que Sánchez se maneja con soltura.
Mañana será la única vez que ambos líderes se reten para contraponer sus diferentes programas políticos, pese a que Sánchez se ha mostrado dispuesto a asistir a todos los debates propuestos por distintos medios de comunicación, pero Feijóo solo aceptó este, organizado por el grupo privado Atresmedia.
El debate tendrá un formato muy cerrado, con un control estricto de tiempos, estará moderado por dos periodistas y un equipo medirá el tiempo de las intervenciones de los dos candidatos para que sean proporcionales.
El minuto de oro final lo iniciará el presidente del Gobierno y lo cerrará el líder del PP, según se estipuló por sorteo.
Este cara a cara se produce después de intensas negociaciones entre los equipos de ambos partidos, y tras la negativa del PP de participar en otro debate a cuatro organizado por RTVE (la televisión pública española) y al que solo asistirán los líderes del PSOE (Sánchez), del grupo de izquierta Sumar (Yolanda Díaz) y del ultraderechista Vox (Santiago Abascal) y que se celebrará el 19 de julio.
Con información de EFE
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