Iglesia dispuesta a acompañar el diálogo entre oposición y gobierno

Llamado al diálogo y a la negociación

Negó que la Iglesia fuera un árbitro electoral, sin embargo en el caso de que les ofrezcan la propuesta de acompañar a los políticos en la mesa de negociación, pues lo harán siempre y cuando sea para ayudar a ambas partes. En especial cuando el diálogo es el mejor camino, dado que hablando se entiende la gente, alegó.

Sugirió no agotar la vía del diálogo entre la oposición y el Gobierno de Nicolás Maduro, puesto que el odio solo lleva al abismo y la injusticia. A su juicio, el pecado de la revolución referente al oficialismo, es vivir de y para la ideología, mientras que la oposición peca al desconocer la importancia de la unidad.

Un pueblo silenciado y asfixiado por el país

Señaló que cuando ocurrió la polémica del Dalái Lama sobre el beso de la lengua a un niño muchos opinaron, en cambio cuando la ciudadanía le corresponde opinar acerca de las acciones o decisiones de el Ejecutivo, pues lo que hacen es leer el libro de “morderse la lengua”. La oposición por lo contrario no sabe morderse la lengua.

«Decir siempre la verdad», señaló, en referencia que ha sido la lección que no han aprendido los connacionales, por ello el pueblo venezolano sigue asfixiado al no haber una colaboración de todos para salir de la situación país.

En entrevista para el portal El Tiempo, el arzobispo de Caracas manifestó que el Vaticano siempre intenta intermediar a Venezuela pero lo hacen sin publicidad ni notoriedad. En similitud, la Iglesia venezolana más de una vez ha puesto la otra mejilla y el Gobierno, el mazo.

Para Porras es importante no perder la esperanza porque al final del día es el pueblo quien se ve afectado cargando su propia cruz. Si el gobierno y la posición busca proceder con soluciones, lo primero es que deben oír a la gente y no solo a sus seguidores.