El FC Barcelona se ha proclamado campeón de Liga este domingo tras ganar en el RCDE Stadium al Espanyol. Los de Xavi, que conquista su primer gran título desde que se hizo cargo al banquillo culé, cantan el alirón con cuatro jornadas aún por delante gracias a su ventaja de catorce puntos con el segundo clasificado, el Real Madrid.

Apostó Xavi por su once de gala para el derbi ante un Espanyol que, necesitado de puntos para mantener vivas sus opciones de permanencia, dio el primer susto antes de que se cumpliera el primer minuto con un disparo de Joselu que se fue desviado. Pedri respondió rápido para el Barça con un disparo que se marchó cerca del palo de la portería de Pacheco.

No iba a tardar mucho la fórmula de Xavi en dar sus frutos. Se cumplía el minuto diez cuando Araújo dio un pase largo para la incorporación de Balde por banda izquierda. El lateral del Barça encaró a Óscar Gil y puso un centro al corazón del área pequeña donde apareció Lewandowski para empujar la pelota a gol y ampliar su ventaja con Benzema en la lucha por el pichichi.

Unos minutos más tarde, el Barça encarriló el partido del todo con el 0-2. Pedri recogió un balón en el interior del área, apuró a línea de fondo y sacó un centro al segundo palo donde Balde volvió a ganarle la partida a Óscar Gil para marcar su primer gol de la temporada empujando la pelota.

El partido se convirtió en un auténtico monólogo del Barça, que mostró una superioridad pasmosa ante el Espanyol. Lewandowski pudo hacer el 0-3 con un disparo cruzado y Koundé también pudo a sumarse a la fiesta antes de la primera media hora con un disparo lejano que se marchó cerca del palo de Pacheco.

El Barça bajó el ritmo en la recta final del primer tiempo, pero eso ni le hizo perder el control del partido ni dio alas al Espanyol. En la recta final de la primera parte, De Jong puso a correr a Raphinha por banda derecha para que el brasileño regalara a Lewandowski su doblete.

El Espanyol pudo acortar distancias antes del descanso con un mano a mano de Braithwaite ante Ter Stegen en el que se impuso el portero alemán.

El equipo perico también dio el primer susto en el inicio del segundo tiempo, pero el Barça iba a aplacar rápido cualquier mínimo atisbo de reacción de los locales con el 0-4. De Jong puso un centro frontal para la llegada desde atrás de Jules Koundé, que ganó la espalda a Puado para marcar de cabeza.

A partir de ahí el partido perdió la poca intensidad que quedaba. Puado maquilló el resultado para el Espanyol resolviendo a la perfección un mano a mano con Ter Stegen, pero era el día de la fiesta del Barça.

Los de Xavi terminaron finalmente levantando su vigesimoséptimo título de Liga cuatro años después del último, el primero con Xavi en el banquillo y el primero de la era post Messi.

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