La respiración profunda o la respiración lenta confiere calma y bienestar a la persona que la practica de forma regular.
Por: El Espectador de Caracas con información de 800Noticias
A continuación, los beneficios de respirar correctamente:
1.- Regula el estrés y la ansiedad
La respiración es una acción que llevamos a cabo de forma involuntaria. Inhalamos oxígeno para obtener y crear energía a nivel celular.
La respiración profunda tiene la capacidad de regular el sistema nervioso parasimpático para estimular un estado de relajación: el corazón entra en calma, como la mente.
2.- Eliminamos toxinas
Este dato es interesante: nuestros cuerpos están diseñados para liberar gran parte de sus toxinas a través de la respiración.
El dióxido de carbono es un residuo tóxico natural que proviene de los procesos metabólicos de nuestro cuerpo y que, por tanto, debe ser expulsado de forma regular.
Sin embargo, cuando nuestros pulmones están acostumbrados a llevar a cabo respiraciones rápidas, no llegamos a expulsar del todo esos elementos de desecho.
Sería muy conveniente que tomáramos conciencia de ello, y que, al menos durante 2 o 3 veces por día, dedicáramos al menos 10 minutos a respirar de forma profunda.
3.- Disminuimos la sensación de dolor
Algo que hacemos muchas veces de forma casi inconsciente cuando sentimos dolor es contener la respiración.
Prueba a contener la respiración unos segundos y respirar de forma profunda y pausada.
De este modo, liberaremos endorfinas, esos analgésicos naturales del cuerpo. De la misma forma, este estudio realizado por la Universidad de Regensburg (Alemania), hace hincapié en el efecto sedante de una buena respiración.
4.- Nos ayudará a mejorar nuestra postura
Algo tan fácil como practicar la respiración profunda desde hoy mismo nos permitirá mejorar nuestro esquema corporal y, sobre todo, el eje espalda-cuello.
Al llenar nuestros pulmones de aire logramos estimular la columna vertebral para colocarla en una postura más armónica, equilibrada y correcta.
5.- Estimulamos el sistema linfático
El sistema linfático es parte esencial del sistema inmunitario del cuerpo y esta compuesto por una compleja red de vasos linfáticos, tejidos, órganos y ganglios que cumplen gran cantidad de funciones.
Una de ellas, la que lleva a cabo el líquido linfático, es liberar de nuestro organismo los restos de las células muertas y otros desechos.
La respiración profunda nos ayudará a conseguirlo, según afirma esta investigación realizada por la Universidad Flinders (Australia).