En el peor momento de la economía cubana en casi 30 años, el congreso del Partido Comunista, que marca la salida de Raúl Castro del poder, tendrá que acentuar las reformas dirigidas a una mayor apertura a la empresa privada.
Por el Espectador de Caracas con información de Noticias al Día y a la Hora
La cita, del 16 al 19 de abril, se celebra en un momento crítico, después de que la economía de la isla se desplomó un 11% en 2020, la mayor caída desde 1993.
Desde el principio de este año, el presidente Miguel Díaz-Canel apretó el acelerador con una profunda reforma financiera para enfrentar la crisis derivada de la pandemia del Covid-19, del reforzamiento del embargo estadounidense y las distorsiones y desequilibrios internos del país.
La urgencia “no es tanto porque en un mes se celebrará el octavo congreso, sino que la economía está en una situación que yo catalogo de crítica”, dijo a la AFP el economista Omar Everleny Pérez, del Centro de Reflexión y Diálogo.
Según la Constitución, el Partido Comunista de Cuba (PCC) concentra el mayor poder del país y sus congresos cada cinco años, hacen balance y marcan las pautas para el próximo quinquenio.
Lea la nota completa aquí