Mantener una relación a distancia es un reto que solo puede superarse con comunicación y confianza. Descubre algunos consejos al respecto.

Por: Espectador de Caracas con información de Mejor con Salud

Tener una relación a distancia hoy en día es mucho más sencillo que unas décadas atrás. Y es que contamos ahora con multitud de medios que nos permiten comunicarnos con el ser amado que vive lejos. Sin embargo, la separación física continúa suponiendo un reto que solo puede superarse con comunicación y madurez. Por lo mismo, queremos proponerte algunas pautas que te ayudarán a confiar en tu pareja a distancia.

Ni los mensajes, ni las videollamadas ni las conversaciones telefónicas pueden suplir el contacto físico y la compañía que obtienen quienes viven cerca de su pareja. Cuando la distancia se interpone pueden surgir temores, inseguridades y reproches.

Saber que nuestra pareja no puede acompañarnos a una salida de fin de semana, dormir a nuestro lado o abrazarnos después de un mal día puede hacernos sentir frustrados e insatisfechos con la relación. Sin embargo, con la confianza como base es posible mantener un vínculo sólido a distancia y disfrutarlo. Te contamos cómo lograrlo.

1. Evalúa el vínculo

Para confiar en tu pareja a distancia es importante que tengas claros algunos aspectos desde el inicio. Por ejemplo, pregúntate si esta relación de pareja es saludable y positiva, si te nutre y te enriquece, si existe la confianza y ambos son capaces de comunicarse abiertamente y con respeto.

Evalúa la forma de resolver los conflictos, de expresar cariño y ofrecer apoyo. Si detectas carencias o áreas de mejora, procura trabajar en ellas con tu pareja desde este mismo momento.

La distancia puede potenciar los aspectos más positivos, pero también los negativos. Es innegable que supone una prueba para el vínculo y cuanto más sólido se encuentre este al afrontar la separación física, más sencillo será superar los retos.

2. Adáptate al cambio

Todas las relaciones se transforman con el paso del tiempo, con la sucesión de eventos y el crecimiento individual de cada uno de sus miembros. Sin embargo, mantener una relación a distancia obliga a replantear las dinámicas. Es importante que tengas presente esta realidad y que ambos sienten las bases de este estado.

No podrán verse a diario, pasar los fines de semana juntos o compartir actividades cotidianas. Cada uno tendrá que continuar construyendo y llevando adelante su propia vida. Esto no supone una ofensa, una traición o una falta de respeto hacia el otro. Si se permiten fluir con este cambio en lugar de oponer resistencia, podrán enriquecerse con la experiencia.

3. Involúcrate en la vida de tu pareja

Aunque no estén físicamente juntos, todavía es importante que cultiven la intimidad, la complicidad y el compromiso. Para ello, asegúrate de compartir con tu pareja el devenir de tu día a día. Cuéntale cómo te ha ido en el trabajo, el plan que has realizado con tus amistades o ese nuevo libro que has comenzado a leer.

Interésate también por los detalles de su vida. Estas conversaciones contribuyen a crear una cercanía emocional y ayudan a la pareja a seguir formando parte de la cotidianidad del otro.

4. Asegúrate de tener metas comunes

Para que una relación a distancia logre mantenerse en el tiempo es necesario que ambas personas compartan unas metas y objetivos comunes. Si existe una fecha de regreso, un plan para volver a convivir o, al menos, la intención de acortar distancias en un momento determinado, la lejanía física resulta mucho más llevadera.

Los dos pueden trabajar en conjunto para ver cumplida esa meta. Del mismo modo, resulta muy positivo establecer citas o viajes de forma periódica, dentro de las posibilidades de ambos.

Si uno de ustedes no está dispuesto a realizar el sacrificio económico y de tiempo que puede suponer el viaje, o no prevé acortar las distancias en el futuro, es difícil que el vínculo se mantenga a largo plazo.