Quince jugadoras de la selección española de fútbol han presentado su renuncia ante la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) «mientras no se revierta» la situación con el actual entrenador del combinado, Jorge Vilda.

Las jugadoras enviaron este jueves un correo electrónico con el mismo texto dirigido directamente al presidente de la RFEF, Luis Rubiales, exponiendo que la actual situación les afecta su estado emocional y la salud. Por eso exigen el cese del seleccionador como condición para volver a vestir la Roja.

Por su parte, la Federación ha reaccionado con un durísimo comunicado en el que asegura que «no va a permitir que las jugadoras cuestionen la continuidad del seleccionador nacional y de su cuerpo técnico». Además, el organismo ha anunciado que no convocará a estas deportistas y que «contará únicamente con futbolistas comprometidas, aunque tenga que jugar con juveniles».

Además, la RFEF sostiene que las jugadoras que han presentado su renuncia solamente volverán al combinado nacional «si asumen su error y piden perdón».

La situación estalló a principios de mes, cuando se rumoreó la posible petición, por parte de algunas de las internacionales, de destituir a Vilda. Entonces el episodio se saldó con dos ruedas de prensa.

En una de ellas, las capitanas Irene Paredes, Jennifer Hermoso y Patricia Guijarro, desmintieron que se estuviese pidiendo esa dimisión, aunque reconocieron que había «ciertos aspectos internos» que se debían «cambiar». Por su parte, Vilda protagonizó la otra rueda de prensa en la que afirmó que se habían «traspasado los códigos del fútbol» y que «lo que pasa en el vestuario se queda en el vestuario».

Entre las 15 jugadoras que han presentado su renuncia, no se encuentra Alexia Putellas, la actual balón de oro y mejor jugadora del mundo, ni la capitana Irene Paredes.